La madrugada del domingo 31 de julio, se produjo una caída de rocas en el nivel 215 de la mina subterránea de Cerro de Maimón, quedando atrapados dos mineros, uno de nacionalidad colombiana y otro dominicano, que se encontraban trabajando, según establece la minera, a 95 metros del área de impacto.
Desde entonces, la situación se ha mantenido entre el suspenso y la esperanza de un rescate, labor que según información suministrada al programa Nuria Investigación Periodística, oficiosamente podría durar un mes.
Las autoridades gestionaron ayuda internacional para lograr que el rescate sea antes de lo debido. El ministro de Energía y Minas informó sobre equipos procedentes de Canadá que servirían de ayuda.
Pero no es la primera vez que sucede esto en esa mina. En menos de un año ha habido dos derrumbes y en el anterior hubo dos personas muertas.
En esta oportunidad, se hizo una investigación de las autoridades y concluyeron que la causa fue riesgos específicos del tipo de trabajo que se realiza allí.
A parte de los derrumbes, ha habido otros accidentes laborales de distintas magnitudes en los últimos dos años. Aún cuanto eso las autoridades hicieron las inspecciones cuando los derrumbes del año pasado y establecieron que cumplían con las normativas de Seguridad y de Salud del trabajador (SST), según los registros que tiene el Ministerio de Trabajo.
Se establece que posiblemente tome un mes ya que toman como referencia que los cuerpos de los derrumbes anteriores que les separaba menos distancia que los actuales fueron de más de un mes
El pasado jueves el presidente Luis Abinader pronunció unas palabras de aliento a Gregores Alexander Méndez Torres, de 28 años, y Carlos Yepez Ospina, colombiano de 40 años, quienes mañana cumplirán una semana de estar atrapados en la sección sur de la mina Cerro de Maimón, en la provincia Monseñor Nouel, operada por la Corporación Minera Dominicana (COMIRDOM) al ocurrir un deslizamiento aproximadamente a la una y diez de la madrugada.
El presidente Junta de Vecinos, Mario Tiburcio Hernández, explicó la manera de darse cuenta sobre la ausencia de un minero en la zona.
“Uno se da cuenta, porque cuando se termina un tiempo de trabajo, una rotación y que salen, tienen que pasar como un listado de los trabajadores que salieron pero cuando pasan ese listado ah pero faltan fulano y fulano. Ahí mismito se dan cuenta y eso no lo pueden ocultar porque los mismos trabajadores se dan cuenta”, expresó.
Dijo además que cuando se dan estas situaciones, sobre todo en los turnos de la madrugada, ya al amanecer, toda la comunidad también se entera, incluyendo a los familiares de Gregory, sobre todo a la abuela que lo crió.
“Mamá cuando vio toda esa gente de la mina que mamá se estaba levantando. Cuando ella vio toda esa gente, mi mamá no se murió de casualidad”, dijo una tía de Gregores.
Agregó: “La única que ha estado un poquito ajena de la situación, en medio de la inocencia propia de su edad, es la hija de Gregory, de apenas 6 años, a quien no le han dicho la realidad de la situación. La niña solo dice que su padre no ha venido de trabajar”.
Además de buen papá, Gregory es buen vecino, según afirman dirigentes comunitarios, incluyendo uno que lo ayudó a obtener su empleo.
“Casualmente, cuando estaba solicitando empleo fue por medio de una protesta que hicieron y fuimos parte de la protesta. A la mina no le gusta, repudia eso, que le hagan protesta porque saben que no le conviene pero el me informo que los muchachos estaban revolteados porque solicitando empleo”, dijo Mario Tiburcio Hernández, Presidente Junta de Vecinos: Presidente Junta de Vecinos.
En algunos casos, el Departamento de Relaciones Comunitarias de la Empresa concede algunas peticiones y este fue el caso, le gestionaron empleos a muchos jóvenes necesitados, entre los que estaba Gregory Alexander, quien día a día arriesgaba su vida en sus labores y era consciente de ello.
La tía de minero dominicano atrapado: Porque dice que el trabajo es malo y que se coge mucha lucha para él, para trabajar y que eso era un peligro muy fuerte. Mi mamá le decía Ale, pero si es demasiado malo y te doy trabajo. Y le decía a él Mire mamá, no hay nada, mire, somos todos pobres, yo quiero hacer una casita, mamá, y ¿cómo la hago si no me gano los chelitos?
Mientras tanto la comunidad establece que el único motivo de preocupación no es el minero dominicano.
“Porque nosotros no queremos solamente a nuestro Alex, el dominicano, sino también al colombiano porque tú sabes que perder vidas, eso es algo imprescindible”, indicó Mario Tiburcio Hernández.
Se refiere al colombiano Carlos Yepes, un consultor internacional independiente que estaba capacitando al personal dominicano de Cormidom.
Su esposa fue traída al país la noche del lunes y desde entonces se mantiene en constante comunicación. Mientras la comunidad de Maimón se mantiene alerta y hacen una advertencia.
“Si esos muchachos no salen con vida de ahí, la comunidad completa de Maimón y el pueblo de Maimón tendrán que tirarse a las calles, porque sentimos que la empresa no está preparada para trabajar explotación minera subterránea”, expresó Tiburcio Hernández, Presidente Junta de Vecinos.