Estados Unidos anunció este miércoles un nuevo paquete de asistencia humanitaria a la población siria por valor de 756 millones de dólares, que se suman a los 800 millones que ya se había comprometido a aportar el pasado mes de mayo.
La embajadora estadounidense ante la ONU, Linda Thomas-Greenfield, dio a conocer estas nuevas ayudas durante una reunión del Consejo de Seguridad centrada en la situación en Siria, donde según Naciones Unidas la crisis humanitaria sigue empeorando.
Thomas-Greenfield dijo que la asistencia responde al plan humanitario preparado por la ONU para Siria y que beneficiará a la población en todas las provincias del país.
Además, la embajadora estadounidense recordó que su país es el principal donante de ayuda a los sirios y pidió al resto de la comunidad internacional que incremente sus aportaciones dado que las “necesidades son demasiado grandes”.
Estados Unidos había anunciado el pasado mayo una contribución de 800 millones de dólares en apoyo de los sirios y los países que acogen refugiados durante una conferencia organizada por la Unión Europea en la que se recaudaron en total unos 4.300 millones de dólares con ese fin para 2022.
La ONU lleva meses advirtiendo de la crisis humanitaria en Siria debido en buena media al colapso de la economía y al impacto del largo conflicto que mantiene al país en la práctica aún dividido.
La enviada adjunta de la organización para Siria, Najat Rochdi, advirtió hoy al Consejo de Seguridad de que las necesidades humanitarias siguen creciendo, pero los recursos se reducen y el acceso de las organizaciones de ayuda continúan siendo difícil.
Rochdi subrayó que, además de dar apoyo humanitario, es necesario frenar la crisis económica y, para ello, hace falta “estabilizar el conflicto y avanzar en una solución política sostenible”.
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“Mientras tanto, los sirios sufren con cosas básicas: comida en la mesa, combustible para calentarse, servicios básicos y sustentos”, apuntó.
Según el plan humanitario que la ONU preparó este año, más del 90 por ciento de la población siria vive actualmente en la pobreza y la inseguridad alimentaria afecta a unos 12 millones de personas.
En total, Naciones Unidas señaló que unos 14,6 millones de sirios necesitan ayuda humanitaria y que otros 12 millones de refugiados que dejaron el país también requieren apoyo internacional.