El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, anunció este viernes la separación de su ministro del Interior, Patricio Carrillo, quien ha sido blanco de críticas en torno al asesinato de una abogada que desapareció en un recinto policial y cuyo principal sospechoso es su esposo, un coronel de la Policía.
Lasso, en un mensaje desde el aeropuerto de la ciudad portuaria de Guayaquil, también pidió perdón a los familiares de la víctima y dijo que reforzará la lucha contra los femicidios con la ayuda de grupos feministas.
El mandatario destacó la gestión de Carrillo, pero dijo que, tras los acontecimientos en torno a este caso, ha pedido que presente su dimisión como ministro del Interior y ha decidido “que sus servicios concluyan el día de hoy”.
Además, dijo que ha dado un plazo de una semana al comandante general de la Policía, Fausto Salinas, para que presente resultados concretos del caso, sobre todo la localización del principal sospechoso del crimen.
El pasado 11 de septiembre la abogada María Belén Bernal acudió a la Escuela Superior de Policía, en el norte de Quito, para visitar a su esposo, el coronel Germán Cáceres, que trabajaba como agente instructor, pero desapareció ese día de la dependencia.
Según las primeras investigaciones, cadetes y oficiales escucharon los gritos de auxilio de la víctima pero no hicieron nada, mientras que el esposo, tras dar una primera versión a la Fiscalía, ha sido declarado prófugo y sin que se hayan conocido indicios de su paradero.
El cuerpo de Bernal fue encontrado el pasado miércoles, diez días después de su desaparición, enterrado entre matorrales en un cerro cercano a la Escuela de Policía, mientras que en un informe forense se ha asegurado que ella murió estrangulada y por asfixia.
“Todos estamos unidos en el dolor e indignación provocados por el femicidio de María Belén Bernal. Este es un luto que no conoce divisiones. Que todos compartimos con la misma rabia”, subrayó Lasso, tras confirmar que ha pedido que la cúpula policial presente sus bajas y que evaluará su permanencia en la institución.
“Llevaremos a cabo todos los procesos legales para degradar al teniente Cáceres, porque no merece ostentar ningún rango que lo asocie con la institución policial”, añadió el mandatario, quien habló de que emprenderá un “largo camino para transformar la Policía”.
Además, se comprometió a fortalecer las políticas encaminadas a intentar erradicar la violencia de género en el país, a cargo de la Secretaría de Derechos Humanos, que contará con todos los recursos necesarios para que “la Ley y el Plan de Prevención y Erradicación de la Violencia de género sean efectivos”.
Lasso también mencionó sobre un trabajo coordinado con las instancias judiciales y los municipios del país, para que se cumplan con las obligaciones de “prevención, atención, y reparación integral a las víctimas de violencia y sus familias”.
“Invitaremos a las organizaciones de mujeres y de defensa de los derechos humanos a trabajar de manera colaborativa en los cambios necesarios para prevenir, atender y erradicar la violencia en contra de las mujeres. Ellas serán veedoras permanentes de este gran cambio al que hoy convocamos”, remarcó Lasso.
Finalmente, el gobernante pidió perdón a la madre de Bernal, Elizabeth Otavalo, y a su familia, así como a todas las víctimas de femicidios en el país.
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“Como presidente, quiero pedir perdón porque esto no debe suceder nunca, pero mucho menos en un edificio público donde se forman quienes deben protegernos”, agregó.
“Ecuador está de luto por María Belén y por todas las mujeres que han sido víctimas de femicidio. La mejor manera de honrarlas será luchar sin descanso para erradicar definitivamente de nuestra sociedad la violencia de género”, apostilló Lasso.
EFE