Luego de su devastador paso por Florida y tocar tierra en Carolina del Sur en Estados Unidos como huracán categoría uno, Ian se degradó a ciclón postropical.
El fenómeno dejó múltiples inundaciones en la ciudad de Georgetown, capital de Carolina del Sur, tras su paso por el estado.
Se espera que se registren inundaciones, mareas de tempestad y vientos potencialmente mortales en otras áreas de Carolina del Sur, así como en los estados de Georgia y Carolina del Norte.
Las autoridades de los tres estados han advertido a los ciudadanos que se preparen para condiciones extremadamente peligrosas y recomiendan a las personas que se resguarden en sus casas.
Henry McMaster, gobernador de Carolina del Sur, mencionó que aún el peligro no termina. “Le recuerdo a la gente que hay aguas en las carreteras. Hemos visto fotografías de ello. (…) todavía hay vientos, si no necesitan conducir no lo hagan”, sostuvo.
El gobernador confirmó que en su estado no se han registrado muertes como consecuencia del paso de Ian.
Al menos 575.000 hogares y empresas estaban sin electricidad el viernes por la noche en Carolina del Sur, Carolina del Norte y Virginia, según la web especializada Power Outage.
A la espera que Ian se disipe durante la jornada de este sábado, las autoridades estadounidenses han confirmado que el huracán dejó al menos 23 muertos, aunque la cadena CNN ha elevado la cifra hasta las 45 víctimas.
NTN24