Momento emotivo en el que Albert Pujols, Yadier Molina y Adam Wainwright se despidieron el domingo de los fanáticos de los Cardenales en el Busch Stadium en su último partido de temporada regular como locales con una derrota 7-5 ante los Pirates de Pittsburgh.
El revés, sin embargo, no aguó la fiesta en la ciudad de Misuri, la cual celebró durante el fin de semana las carreras de ambas leyendas de la organización y considerados futuros miembros del Salón de la Fama. El domingo, se presentaron 46,680 personas y los Cardenales terminaron con la segunda mejor asistencia de la campaña 2022, detrás de los Dodgers de Los Ángeles.
Al igual que en su primer turno el 9 de abril de 2001, el toletero dominicano aprovechó su última oportunidad en un partido regular en la caja de bateo del nido de los pájaros rojos para dar un cuadrangular, bambinazo en la tercera entrada que arribó al jardín central del estadio.
Con el garrotazo, Pujols empató el desafío 4-4 e hizo más historia al igualar con el legendario Babe Ruth en la lista de más carreras remolcadas de todos los tiempos en las Grandes Ligas con 2,114. En el primer episodio, remolcó dos con un doble ante los envíos del abridor pirata Roansy Contreras.
“Se sintió bien. No era mi plan. Mi trabajo era salir allá afuera y hacer el mejor trabajo posible, ayudar a mi equipo ganar”, declaró Pujols sobre el vuelacercas.
Molina, quien abrió el partido número 328 junto a Wainwright, también una marca de batería inédita en las Mayores, terminó el fin de semana bateando de 0-8 con dos carreras remolcadas.
Albert Pujols, Yadier Molina y Adam Wainwright salieron juntos del terreno de juego
Wainwright (11-12) duró 4.2 entradas de seis hits y seis carreras permitidas con cuatro ponches. El dirigente Oliver Mármol decidió sacar al derecho a la misma vez que Molina y Pujols del partido. El trío estelar de San Luis caminó junto por última vez al dugout del Busch Stadium ovacionados por sus fanáticos.
“Quería que los tres salieran juntos. Era cuestión de cómo hacerlo, en cuál entrada. Asegurarnos de que ellos dos (Molina y Pujols) tuvieran al menos dos turnos al bate. Fue una combinación de muchas cosas pero fue emotivo verlos caminar juntos por última vez”, dijo Mármol luego del partido.
Previo a la jornada, Wainwright, la gerencia de los Cardinals y los aficionados celebraron las carreras de Molina y Pujols con un emotivo homenaje en el terreno. Ambos peloteros estuvieron rodeados de sus familias durante sus discursos de agradecimiento.
Los Cardinals (92-67), ganadores de la División Central de la Liga Nacional, ahora se dirigen a Pittsburgh, donde Molina jugó su primer partido de las Mayores con San Luis en 2004, para una última serie de tres partidos. La novena jugará desde el viernes como local la serie de comodines con un rival aún por decidirse.