Israel detuvo a 5.300 palestinos en Cisjordania ocupada y Jerusalén Este desde el comienzo del año, informó hoy la Sociedad de Prisioneros Palestinos (SPP), que detalló que 620 de ellos eran menores.
Del total de detenidos, precisó el informe de SPP, 1610 fueron arrestados bajo el régimen israelí de detenciones administrativas, por el que mantienen a palestinos encarcelados sin cargos ni juicio por períodos renovables de manera indefinida, que oscilan entre tres y seis meses, sobre la base de presuntas pruebas secretas que ni el abogado ni el detenido pueden revisar.
Además, fueron detenidas 111 mujeres, mientras que los restantes son hombres de 18 años.
Según informó a EFE un portavoz del SPP, la mayoría de los palestinos detenidos por Israel en 2022 fueron liberados, y la cifra actual de personas aún encarceladas -incluyendo detenidos en años anteriores- se eleva a 4650.
De este número, 181 son menores de edad, 31 son mujeres y unos 800 están en detención administrativa.
Estas cifras marcan una continuidad respecto a los últimos años, sobre todo en el total de palestinos que permanecen encarcelados.
En cuanto al número de detenidos este año, sí representa un aumento respecto a años previos, y de mantenerse la tendencia actual podrían superarse los 6.000 en el año por primera vez desde la denominada “Intifada de los Cuchillos” de 2015.
Las cifras registradas este año se dan en el marco de incesantes redadas del Ejército israelí en Cisjordania ocupada desde una fuerte ola de ataques en abril, perpetrados por palestinos y árabes-israelíes y que se saldó con la muerte de 18 personas.
Estas redadas, sumadas a una serie de ataques palestinos frustrados, enfrentamientos armados y otros incidentes violentos, han dejado ya un saldo de 120 muertos palestinos en Cisjordania ocupada este año, convirtiéndolo en el más sangriento desde 2015.
Del lado israelí, este año también se ha registrado el máximo de muertes desde 2015: 22 en total, de los cuales 15 eran civiles y siete eran miembros de las fuerzas de seguridad.
EFE