Los primeros resultados tras el cierre de los colegios electorales, los resultados dan el 51,13 % al actual presidente, Jair Bolsonaro, mientras al exmandatario Luiz Inácio Lula da Silva el 48,87 % de los votos, con el 27,80 % de las urnas escrutadas.
Más de 156 millones de personas estaban llamadas a votar en estas elecciones, las más polarizadas de la historia del país, con dos propuestas antagónicas.
La campaña ha sido una de las más violentas que se recuerdan en Brasil. Este domingo, los electores también han votado para elegir al gobernador de São Paulo y de otros 11 estados que no resolvieron el resultado en primera vuelta.
La jornada se ha visto empañada con denuncias de que la Policía Federal de Carreteras, un cuerpo considerado cercano a Bolsonaro, realizó cientos de operaciones en las que detuvo a autobuses para revisar la documentación de los votantes, especialmente en los estados de nordeste (donde Lula tiene mayoría), lo que atrasó el ritmo de votación. El presidente del Tribunal Electoral, Alexandre de Moraes, declaró que lo ocurrido no afectará en los resultados.
Lula rozó la victoria en primera vuelta, el 2 octubre, con el 48 % de los votos, una cifra ajustada a lo que pronosticaban los sondeos. Bolsonaro, sin embargo, sorprendió con un 43 %, entre siete y ocho puntos porcentuales más de lo que le atribuían.
“Hoy es posiblemente el 30 de octubre más importante de mi vida. Y creo que es un día muy importante para el pueblo brasileño porque está definiendo el modelo de Brasil que quiere, el modelo de vida que quiere”, declaró Lula esta mañana al depositar su voto.
Por su parte, Bolsonaro dijo que tenía “expectativa de victoria por el bien de Brasil”. “Tuvimos buenas noticias en los últimos días. Si dios quiere, ganaremos hoy por la tarde”, afirmó.