Bonao.- Sin arrepentimiento es como se muestra Carlos Campusano, el homicida que mató a tres personas, incluyendo su esposa en un hecho que conmocionó el municipio de Bonao, provincia Monseñor Nouel.
Campusano, de acuerdo a su forma confirma al decir que la mujer a quien quería matar, se le salvó, no identificando de quien se trataba.
«Se salvó la que yo quería matar de verdad», fue la expresión que salió de su boca aun estando postrada en una cama de hospital ya que, además de quitarles la vida a su esposa, su supuesta amante y otro hombre, Campusano trató de suicidarse.
En tanto, el hombre hirió a cuchilladas a otras personas, incluyendo a uno de sus hijos, quien trató de defender a su madre de la furia de su progenitor, aunque con resultados infructuosos.
Esa oración salió frente a una cámara que grabó su estado actual: con parte de la cara vendada, una bata de hospital azul y una sábana cubriéndolo de la cintura para abajo.
Además, la presencia de una de sus hijas sumida en el llanto no fue impedimento para que el homicida se cohibiera de expresar esas palabras, a quien solo se limitó a decirle «no llores mi hija y sal de aquí.