La penetración que tuvo el merengue a mediado de la década de los 80 provocó que los salseros de Puerto Rico se unieran y planearon crear un boicot para impedir que el ritmo se apoderara en la Isla del Encanto.
La revelación fue hecha por Jesús Puti Pérez, productor musical y creador de “Los Hijos de Puerto Rico”, una de las orquestas de merengue más icónica, radicada en Puerto Rico, con materia prima dominicana.
Pérez cuenta que para 1984 los salseros boricuas temieron a ser desplazados por el merengue. Para la época, El Conjunto Quisqueya y Jossie Esteban eran ídolos y no querían que nuevas agrupaciones arribaran allá.
Puti Pérez no conocía el negocio de la música y se dedicaba al oficio de tornero. El nativo de Montellano, se radicó, en su juventud, en Villa Altagracia, donde conoció al adolescente Sergio Vargas. Se mudó en el 1978 a Puerto Rico y allá recibe a Sergio Varga cuando logra viajar con la orquesta de Los Hijos del Rey y es quien lo recomiendó para que fuera el representante de la agrupación en Puerto Rico.
Entrevistado por Albert Bernabé (Bebeto) en su programa “El Túnel del Tiempo”, Pérez cuenta que para esa época se desempeñaba como el manejador de los Hijos del Rey, en Puerto Rico, y vendió 32 bailes, para amenizar graduaciones y patronales.
A los integrantes de la agrupación dominicana, manejada por Cholo Brenes, se le negó el visado, que atribuyó al boicot de los salseros, y ya había una importante cantidad de dinero adelantado.
Es cuando se le ocurre a Pérez crear una versión de los Hijos del Rey, en Puerto Rico, con consentimiento de Brenes y Bienvenido Rodríguez. Lo hizo con músicos radicados en la vecina isla y tuvo que venir a RD a buscar una de las figuras, cantante, de la agrupación y optó por Sergio Vargas, quien se le negó porque estaba muy enamorado de su novia de entonces y optó por llevarse a Jacinto, ilegalmente en una avioneta que pilotaba un boricua amigo suyo y lo hizo pasar como copiloto.
La pegada de la versión puertoriqueña de los Hijos del Rey fue todo un éxito, mientras se desintegró el grupo original en RD. El éxito del tema: “La quiero a morir” de Sergio Vargas, le dio tanta pegada que solo pudo cortarse cuando Brenes y Bienvenido Rodríguez le impidieron a Puti Pérez usar el nombre de los Hijos de Rey.
Pérez cuenta que como siempre llamaban a la agrupación “Hijos”, de ahí surge el nombre de Los Hijos de Puerto Rico.
Un tropiezo al inicio del grupo fue que Jacinto, el cantante principal y a quien Puti Pérez llevó ilegalmente en una avioneta, lo ubicó y le regaló un carro, lo abandonó y se fue con El Conjunto Quisqueya, que era de mayor fama y prestigio en Puerto Rico.
Desanimado y con poco deseo de continuar, es motivado por el empresario disquero Frank Torres y logra juntar a Tony, a quien conquista de la orquesta de Jossie Esteban y La Patrulla 15, Gerald y le presentan al jovencito Omar Demorizi, quien trabajaba en la industria de la construcción.
En breve tiempo, Demorizi asume el liderazgo de Los Hijos de Puerto Rico, gracias a que el compositor peruano, Carlos de la Cima, le facilita a Puti Pérez tres temas y sugirió que debían ser grabados por Omar y convirtieron en súper éxitos: “Separados”, “Amor de Novela” y “Lloré”
Puti Pérez cuenta que la fortuna le sonrió, pues el programador de Radio Sol, en Miami, estaba atravesando un proceso de divorcio con su esposa y el tema “Separado” le llegó al alma y ordenó colocarlo cada hora. Esto provocó que Los Hijos de Puerto Rico se adueñaran de esa plaza de Estados Unidos.
La agrupación tocó fondo cuando Puti Perez realizó un mal negocio con un empresario y firmó un contrato por producciones y esto estancó el grupo.
Los Hijos de Puerto Rico buscan reagruparse y planean un reencuentro el 11 de agosto, en un concierto en Hard Rock, Santo Domingo, producido por Bebeto.