El Ejército israelí instó a los milicianos del grupo islamista Hamás en la Franja de Gaza a rendirse ante la entrada de sus tropas al enclave, según confirmó hoy un portavoz militar a EFE.
“Los líderes de Hamás os están explotando. Ellos y sus familias están en lugares seguros mientras vosotros morireis en vano“, se lee en una octavilla lanzada desde el aire en Gaza por el Ejército israelí.
“Los líderes de Hamás comenzaron una guerra perdida”, agrega el mensaje, que denuncia además que los crímenes cometidos por el grupo islamista durante la masacre de israelíes el 7 de octubre, “contradicen la religión musulmana”.
Las papeletas lanzadas por el Ejército israelí indican que, para rendirse, los combatientes deben abandonar su equipamiento militar, levantar las manos y, si pueden, ondear un papel blanco.
Quienes quieran rendirse, agrega el mensaje, deben seguir las instrucciones de los soldados israelíes y no deben traer con ellos agua ni alimento, que les serán proporcionados por el Ejército.
Este sábado, el Ejército lanzó octavillas sobre Gaza en las que avisó a sus habitantes de que la zona “es ahora un campo de batalla” y les instó a evacuar inmediatamente hacia el sur.
Estos mensajes coinciden con el avance de las tropas israelíes dentro de la Franja de Gaza, tras la ampliación el viernes de las actividades terrestres del Ejército en el enclave, en paralelo con una intensificación de los bombardeos.
Este domingo, los soldados mataron a combatientes de Hamás que habían intentado atacarlos en la costa del enclave, en una zona cercana a la valla de separación, según informó un portavoz militar.
Anteriormente, las Fuerzas de Defensa de Israel habían informado de que atacaron en el último día más de 450 objetivos militares de Hamás en distintas partes de la Franja de Gaza.
La guerra entre Israel y Hamás comenzó el 7 de octubre, tras el ataque de Hamás contra suelo israelí que dejó 1.400 muertos, unos 5.000 heridos y 230 secuestrados que fueron llevados a Gaza.
Desde entonces, Israel ha bombardeado Gaza y amplió sus operaciones terrestres el viernes, lo que ha causado más de 8.005 fallecidos y 20.252 heridos desde el pasado día 7.