Donald Trump será juzgado a partir del 15 de abril por cargos relacionados con pagos para encubrir acusaciones de infidelidad matrimonial, dictaminó hoy un juez de Nueva York al desestimar escuetamente las acusaciones de mala conducta del fiscal de la defensa.
Suponiendo que la fecha se mantenga, la decisión del juez Juan M. Merchan garantiza que el procesamiento será el primero de cuatro casos penales contra Trump en llegar a juicio.
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El candidato republicano estuvo frente a un jurado de manera virtual en la ciudad donde construyo un imperio empresarial hace décadas y gano estatus de celebridad.
El juicio, inicialmente previsto para hoy, estaba en el limbo después que un volcado de documentos de último momento provocó el aplazamiento de la fecha original.
Los fiscales dijeron que sólo un puñado de esos registros recién publicados eran relevantes para el caso, mientras que la defensa sostuvo que miles de páginas son importantes y requieren una revisión minuciosa.
Merchan, dijo a la defensa que deberían haber actuado mucho antes si consideraban que no tenían todos los registros a los que creían que tenían derecho.
Fuera de la sala del tribunal, Trump se quejó del fallo y caracterizó el caso, como lo ha hecho repetidamente, como un acto de “interferencia electoral” en medio de su campaña presidencial.
“Este es un caso que podría haberse iniciado hace tres años y medio. Y ahora están peleando durante días porque quieren intentar hacerlo durante las elecciones. Esto es interferencia electoral. Eso es todo. Interferencia electoral y es una vergüenza”, dijo el expresidente.
La audiencia tuvo lugar en un día trascendental para los asuntos legales de Trump, ya que un tribunal de apelaciones de Nueva York le concedió una dosis de buenas noticias al aceptar posponer el cobro de su sentencia por fraude civil de 454 millones de dólares, si aporta 175 millones de dólares en un plazo de 10 días.