La Fundación Archewell, encabezada por Meghan Markle y el Príncipe Harry, ha sido catalogada como “morosa” por las autoridades regulatorias de California (Estados Unidos), quienes les han instruido suspender cualquier solicitud o gasto de fondos.
El 3 de mayo, el Fiscal General de California, Rob Bonta, emitió una notificación de morosidad en nombre del Registro de Organizaciones Benéficas y de Recaudación de Fondos, indicando que la Fundación Archewell no cumplió con la presentación de informes anuales y pagos requeridos para mantener su estatus en regla.
El incumplimiento implica la prohibición de realizar actividades sujetas a registro, como solicitar o utilizar fondos benéficos.
Según el documento obtenido por la revista People, la Fundación se encuentra en esta situación debido a la omisión de presentación de informes y pagos necesarios para mantenerse al día.
Una fuente reveló que aunque la Fundación Archewell presentó su solicitud a tiempo, el cheque enviado no fue recibido, y la Fundación no tuvo conocimiento de ello hasta la notificación de morosidad. Un nuevo cheque ha sido enviado y se espera que el problema se resuelva pronto, reflejándose en los registros en los próximos siete días hábiles.
La Fundación Archewell, establecida por el Príncipe Harry, de 39 años, y Meghan, de 42, tras su retirada de los roles reales en 2020, tiene su sede registrada en Beverly Hills, California, aproximadamente a dos horas de su residencia en Montecito.
La Fundación Archewell se presenta en su sitio web con una misión de servicio y compasión, buscando unir y elevar comunidades locales y globales a través de acciones concretas. El propósito de la Fundación es fomentar la compasión como una fuerza cultural y apoyar el cambio sistemático a través de una red de organizaciones asociadas.
Esta visita marca su primera gira internacional desde que dejaron sus roles reales en 2020, y fue realizada por invitación del Jefe de Estado Mayor de la Defensa de Nigeria, el oficial militar de más alto rango del país.
Se trató de una visita que, aunque no es oficial, tiene tras de sí un fuerte componente institucional, pues el motivo detrás de esta escapada se encuentra en los Juegos Invictus, fundados por el hermano del príncipe William para apoyar a los veteranos de guerra que padecen algún tipo de lesión y a sus familias.
A su llegada, fueron agasajados con collares tradicionales y con una emotiva ceremonia de bienvenida. Después de reponerse del viaje, el hijo menor de Carlos III y su esposa visitaron la Academia Wuse Lightway, un centro educativo que cuenta con el apoyo de Fundación Archewell. Allí, presenciaron un espectáculo de danzas típicas de la etnia igbo.