Por Carlos Arturo Guisarre. El patrimonio de Abel Martínez, pasado candidato presidencial del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), experimentó un aumento de 106.18% durante los 8 años en los que estuvo al frente de la Alcaldía de Santiago, de acuerdo con las declaraciones juradas colgadas en el hipervínculo de consultas de la Cámara de Cuentas.
Martínez vio fluctuar positivamente el valor de sus bienes desde 27.5 millones de pesos DOP en 2016, hasta 56.7 millones de pesos DOP en 2024, momento en el que dio paso a otra administración que se estrenó en abril pasado.
El mayor salto en su situación patrimonial lo reportó el exalcalde entre 2016 y 2020, cuando sus bienes pasaron de 27.5 millones de pesos DOP a 46.1 millones de pesos DOP, de modo que en sus últimos cuatro años vio avanzar mucho menos sus arcas.
Las “riquezas” de Martínez se concentran en especial en bienes raíces, tanto de carácter residencial como de denominación rural, lo que puede explicar que su patrimonio crezca al mismo ritmo con el que se aprecian las propiedades inmobiliarias en República Dominicana.
Por ejemplo, en 2016, el excandidato presidencial reportó la propiedad de apartamentos, locales comerciales y lotes rurales, mientras que en 2020 también presentó propiedades inmobiliarias complementadas con la propiedad de vehículos de motor.
Igualmente, en 2024 aumenta la tenencia de propiedades rurales, lo que puede explicar el salto en la configuración de su patrimonio, de acuerdo con las declaraciones juradas que él entrega a la Cámara de Cuentas.
Los funcionarios de República Dominicana están obligados a presentar una declaración jurada de patrimonio para asegurar la transparencia y prevenir la corrupción. Esta obligación busca garantizar que los bienes y propiedades de los funcionarios públicos se mantengan dentro de los límites de lo que se puede justificar con sus ingresos legales.