El presidente estadounidense Joe Biden brindó este miércoles un discurso desde su oficina en la Casa Blanca, apenas tres días después de anunciar su baja de las elecciones de noviembre. Su aparición, que estuvo minuciosamente planificada, buscando destacar los éxitos de su gestión para fortalecer su legado y apoyar a la vicepresidente, Kamala Harris, su elegida para seguir en la carrera.
“La defensa de la democracia es más importante que cualquier título”, dijo al inicio. “Saco fuerzas, y encuentro alegría, trabajando Para el pueblo estadounidense. Pero esta sagrada tarea de perfeccionar nuestra Unión no se trata de mí. Se trata de ustedes. De sus familias. De su futuro. Se trata de ‘Nosotros, el Pueblo’”, insistió.
Entre ello, mencionó, por ejemplo, la reducción de los costes para las familias trabajadoras el crecimiento de la economía, la defensa de las libertades personales y los derechos civiles, desde el derecho al voto hasta el derecho a elegir.
“Ha sido el privilegio de mi vida servir durante 50 años”, continuó
“Creo que lo mejor para mi partido y para el país es que me retire y me centre únicamente en cumplir con mis obligaciones como Presidente durante el resto de mi mandato”, sumó.
Nuevamente, demostró su apoyo a Harris, a quien agradeció: “He tomado mi decisión, quiero dar las gracias a nuestra Vicepresidenta, es fuerte”.
Por último, destacó que en unos meses, el pueblo irá a las urnas y elegirá entre “la unión y la división”. “Lo bueno de Estados Unidos es que aquí no gobiernan reyes ni dictadores. Gobierna el pueblo”, subrayó.
Antes de cerrar, dijo con esperanza que “la historia está en sus manos, el poder está en sus manos, la idea de Estados Unidos está en sus manos”.
Si bien Harris ya alcanzó el apoyo de suficientes delegados demócratas para su nominación, lo cierto es que aún no ha sido formalmente elegida por el partido para ser la sustituta oficial.
Los principales interrogantes en la política estadounidense por estos días recaen en el desempeño que tendrá la funcionaria, que sería determinante no solo para el futuro del país sino también para la forma en la que Biden pueda ser recordado.
sus discursos en los éxitos de los últimos tres años -entre los que se encuentran una amplia legislación interna, la renovación de alianzas con países clave y la defensa de la democracia- alertando sobre “lo que se avecina” con la propuesta del republicano Donald Trump.
Sin embargo, muchos temen que esto no sea suficiente para vencer a la contraparte y evitar un segundo mandato del rojo en la Casa Blanca, sobre todo por lo avanzado que está ya el calendario electoral, luego de que el Presidente se negara durante semanas a abandonar la carrera, incluso con la presión al interior de su círculo.
“Si ella (Harris) gana, se confirmará que él (Biden) hizo lo correcto para combatir la amenaza que constituye Trump y será visto como una leyenda en favor de la democracia. Pero si pierde, creo que habrá preguntas como ¿se retiró demasiado tarde? ¿El partido demócrata habría sido más efectivo si él hubiera dicho que no se postularía?”, explicó la historiadora presidencial y directora de la Biblioteca Presidencial George Washington, Lindsay Chervinsky.
En este contexto, el Presidente se dirigirá a los estadounidenses a las ocho de la noche (hora del Este de EEUU) y pronunciará un discurso elaborado por sus ghostwriters, cargado de realismo político y muestras de sus cincuenta años de victorias y derrotas en lo que respecta a su paso por la política nacional, que incluyen la caída de Richard Nixon, el ascenso de Ronald Reagan, el surgimiento de Barack Obama y, no menor, la irrupción de Trump.
Asimismo, mencionará cómo tomó la decisión de renunciar a la campaña, poniendo el foco en el sueño colectivo de un mejor país, que implica la continuidad de Harris, la primera mujer afroamericana que podría llegar a la Oficina Oval.
En ese sentido, en la carta difundida el domingo escribió que “ha sido el mayor honor de mi vida servir como su Presidente y, aunque ha sido mi intención buscar la reelección, creo que es en el mejor interés de mi partido y del país que me retire y me concentre únicamente en cumplir con mis deberes como Presidente durante el resto de mi mandato” y cerró: “Creo hoy lo que siempre he creído: que no hay nada que Estados Unidos no pueda hacer cuando lo hacemos juntos. Solo tenemos que recordar que somos los Estados Unidos de América”.
FUENTE/ INFOBAE