Lima, EFE.- El expresidente peruano Alberto Fujimori (1990-2000) recibirá una pensión vitalicia de 15.600 soles (4.100 dólares), ocho meses después de su excarcelación y a pesar de que no pagó la reparación civil por los delitos contra los derechos humanos y corrupción por los que fue condenado, confirmó este viernes el presidente del Congreso, Eduardo Salhuana.
En declaraciones a la emisora RPP, Salhuana dijo que Fujimori hizo la solicitud este año y que, después de recibir los informes técnicos y de presupuesto, “el 10 de julio el Congreso ha notificado mediante este documento al señor Alberto Fujimori de que la pensión es procedente”.
Fujimori, de 86 años, recibe en Lima un tratamiento por un cáncer a la boca, además de haberse sometido a una operación a la cadera, pero su hija Keiko Fujimori anunció hace unas semanas que desea que sea el candidato de su partido Fuerza Popular a las elecciones presidenciales de 2026.
Salhuana detalló que la solicitud de Fujimori fue recibida, en abril pasado, por la Oficialía Mayor del Congreso y que la aprobación final fue otorgada por la Oficina Legal y Constitucional del Parlamento, razón por la cual ya no necesita de la ratificación de la mesa directiva.
Dijo que comprendía que la pensión de Fujimori puede resultar “discutible” y “controvertida”, pero subrayó que el Congreso pidió opinión a las áreas especializadas que declararon procedente la solicitud del expresidente.
“Es una decisión que ha pasado y que ha sido evaluada por las instancias administrativas del Congreso”, expresó Salhuana, legislador del partido conservador Alianza para el Progreso (APP).
La medida aprobada por el Congreso ha recibido el rechazo de diversos sectores políticos y jurídicos, pues de acuerdo con la legislación peruana esa pensión vitalicia queda suspendida en el caso de que el exmandatario haya sido acusado constitucionalmente y luego condenado.
Fujimori, que recibirá 15.600 soles en un país donde el sueldo mínimo es de 1.025 soles, fue denunciado constitucionalmente por el Congreso en el año 2000, después de su renuncia a la presidencia cuando se destapó un gran escándalo de corrupción en el Estado.
Un año después fue inhabilitado, cuando se refugió en Japón por varios años.
El exmandatario fue condenado en 2009 a 25 años de cárcel por las matanzas de Barrios Altos y La Cantuta, en las que murieron 25 personas, y de la misma forma recibió otras condenas por actos de corrupción cometidos en su Gobierno.
No obstante, en 2017, Fujimori recibió un indulto humanitario del expresidente Pedro Pablo Kuczynski pero no pudo salir de la cárcel hasta el año pasado, cuando el Tribunal Constitucional falló a favor de que le restituyan ese beneficio.
Sobre la posibilidad de que el exmandatario utilice la pensión para pagar la reparación civil de 57 millones de soles (15 millones de dólares), el presidente del Parlamento dijo que “el beneficiado tomará la decisión que considere pertinente y escapa de la decisión del Congreso”.