Un robot llamado Zhiyin tuvo la oportunidad de dirigir una orquesta en Pekín, China, el 10 de septiembre, donde además presentó una pieza musical creada por él mismo.
Esta impresionante máquina, que funciona con un avanzado sistema de inteligencia artificial (IA), fue creada y programada por el propio Conservatorio Central de Música de Pekín. Zhiyin no solo dirigió a la orquesta, sino que también presentó una pieza musical compuesta por él mismo, demostrando la capacidad creativa de la IA en el ámbito artístico.
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Este acontecimiento ha generado un debate profundo sobre la integración de la inteligencia artificial en las artes y, más específicamente, en un campo tan tradicional como la música clásica. Aunque los músicos humanos han dirigido orquestas por siglos, el surgimiento de un robot capaz de hacerlo plantea preguntas fundamentales sobre el futuro de la dirección orquestal y el lugar que ocuparán las máquinas en la creación y ejecución musical.
Por: Elvis Minaya