El Ministerio de Educación aclaró que el embargo reciente a las cuentas de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP) no se debe a razones sindicales ni electorales, sino a la prolongada suspensión de la docencia en Barahona, iniciada al comienzo del año escolar por parte de la ADP.
El ministerio señaló que la paralización de clases en Barahona, así como en Azua y San Francisco de Macorís, fue impulsada por una facción minoritaria de la ADP, que presiona a través de los paros como estrategia para promover a sus candidatos.
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Sostuvo que eso atenta contra el derecho de los estudiantes a una educación de calidad y la continuidad del calendario escolar.
El ministro de Educación, Ángel Hernández, reafirmó el compromiso del Minerd de salvaguardar el derecho de los niños y adolescentes a recibir una educación continua, subrayando que no se permitirá que grupos anárquicos dentro del gremio sindical pongan en riesgo este derecho fundamental.