Leones del Escogido y Gigantes del Cibao protagonizarán este sábado un choque que podría resultar de vida o muerte para ambos equipos, a partir de las 4 de la tarde en el Estadio Quisqueya.
Si ganan, los Gigantes empatarían con el Escogido en el importante cuarto lugar del torneo de béisbol. Entonces habría un juego entre Gigantes y Toros mañana domingo, y otro partido entre Tigres y Escogido el lunes.
Pero si el resultado es diferente y triunfan los Leones, entonces el equipo rojo pasaría al Round Robin junto a Estrellas, Águilas y Licey, conjuntos que ya clasificaron.
Si Escogido y Gigantes terminaran empatados, tendrían que echar un juego decisivo el próximo 31 de diciembre. Los pelos se pondrían de punta el último día del año, y la adrenalina se elevaría al máximo.
Los Leones están en buen momento, después de caer dramáticamente desde la cima. En los primeros 20 juegos reinaron sobre todos los demás equipos, pero luego entraron en crisis perdiendo muchos partidos.
El equipo de San Francisco de Macorís ha venido de menos a más. Estaba hundido y luego se levantó, hasta el punto de colocarse a solo un juego de la clasificación. Si gana los dos compromisos que le quedan, y el Escogido perdiera un juego, los Gigantes llegarían a la semifinal.
Muchas cosas están todavía por verse, en este fin de año. Finalmente, viene la gran pregunta: ¿Quién va a clasificar: Leones o Gigantes?, ¿Gigantes o Leones? En una lucha cerrada, nadie sabe qué va a suceder. Si los Leones, los dos equipos de la Capital habrían clasificado. Si Gigantes, los conjuntos del Cibao pisarían el Round Robin.
A pesar de todo hay una sola cosa clara, y es que el conjunto de los Potros se juega su suerte en el terreno de juego, dejando el pellejo y el forro en dos juegos de pura adrenalina.
