Por Raúl Germán Bautista.- Los encantos del mar Caribe, desde el sur del país hacia Santo Domingo, son vastos y sus paisajes parecen sacados de una postal.
Sus playas, casi nunca hay una oportunidad de verlas desde las alturas, para así poder apreciar sus verdaderas dimensiones, potencialidades y bellezas, las cuales son de las mejores de todas las Antillas Mayores.
Arenas blancas de sus playas, que se entremezclan con fondos oscuros y color azul turquesa, bordeados por el verdor de una vegetación que resiste casi todo el año la visita del sol ardiente caribeño, intenso por demás.
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Aunque no todo es belleza, ya que, según una investigación, elaborada por el Ministerio de Turismo, los principales problemas de la zona costera dominicana son:
1- Contaminación en los estuarios, las lagunas costeras, las cañadas, ríos y el mar con desechos orgánicos e inorgánicos.
2- Instalación de marinas y canales de navegación en lugares inapropiados.
3- Destrucción de dunas y destrucción de la vegetación costera, ya sea por las prácticas indebidas amparadas en la gestión o por el uso de las playas como área de circulación y estacionamiento.
4- Dragado de las costas y su consecuente erosión de las playas y espacios de corales asociados y extracción de agregados y otros materiales de las playas para la construcción, o bien extracciones de arenas en playas vírgenes para rehacer playas degradadas.
5- Modificación del paisaje costero producto de destrucción de cabos y otros perfiles costeros.
6- Extracción de arrecifes de coral para elaboración de joyas y otros tipos de adornos.
7- Destrucción de las áreas de praderas de fanerógamas marinas con pretexto de limpieza de playa en áreas turísticas o por uso indebido de embarcaciones.
8- Construcción de espigones que interfieren la dinámica marina y obras de ingeniería por encima de la capacidad de soporte del sistema.
9- Sobrepesca estuarina y en el mar, además del uso de artes de pesca prohibidos que afectan a los corales.
El estudio agrega que la Ley 64-00, que crea el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MIMAREMA), no menciona el Manejo Costero Integrado (MCI) como una alternativa sostenible de los espacios costero marinos, sin embargo, se han estado apoyando iniciativas tendentes al MCI, en zona turísticas claves, en áreas protegidas y costeras y en zonas con poco impacto.
Continúa explicando que los resultados de los proyectos ejecutados hacia el MCI no han llegado a las diferentes instancias de decisión ni a las comunidades de la República Dominicana.
Sin lugar a dudas, que un país que recibe más de 10 millones de turistas debe, con urgencia, cuidar sus atractivos naturales, como el caso de las playas, que por distintas vías están siendo contaminadas o afectadas.
La contaminación es el principal problema, ya que el crecimiento sin planificación hace que los afluentes y ríos que alimentan las playas las contaminan y vierten desechos sólidos.
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