El papa Francisco expresó este domingo su cercanía a los habitantes de Los Ángeles, en California, Estados Unidos, y aseguró que reza por ellos, durante el rezo del ángelus asomado a la plaza de San Pedro desde el palacio pontificio.
“Estoy cerca de los habitantes de Los Ángeles, en California, donde en los pasados días se han producido incendios devastadores. Rezo por todos vosotros”, dijo el papa.
Este sábado, el papa envió un telegrama en la que expresó su tristeza “por la pérdida de vidas y la destrucción generalizada causada por los incendios”.
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En el mensaje, enviado en nombre del pontífice por el secretario de Estado, el cardenal Pietro Parolin al arzobispo de Los Ángeles, José Gómez, también aseguraba su cercanía a las comunidades afectadas por esta tragedia y rezaba “por los esfuerzos del personal de rescate de los servicios de emergencia”.
Los incendios de estos días en Los Ángeles hasta el momento han dejado un saldo de 16 víctimas fatales, una cifra que se teme pueda aumentar una vez que los equipos de rescate puedan comenzar a buscar entre los escombros y más de 150.000 personas continúan bajo orden de evacuación.
El nivel de destrucción que ha alcanzado la ciudad de las estrellas sobrepasa las 12.000 estructuras y el último reporte de AccuWeather aumentó la estimación de los daños totales y las pérdidas económicas de 135.000 a 150.000 millones de dólares.
Las llamas continúan avanzando
El incendio más grande, conocido como Palisades, ha consumido 8.740 hectáreas desde que comenzó el pasado martes. Actualmente, se encuentra contenido en apenas un 8%, según el Departamento de Bomberos de California (Cal Fire). El fuego avanzó durante la madrugada del sábado hacia zonas residenciales, provocando nuevas órdenes de evacuación obligatoria en áreas como Brentwood, Encino y el Getty Center, un importante centro cultural de la región.
Además del incendio de Palisades, el Eaton Fire, localizado en las proximidades de Altadena y Pasadena, ha quemado 14.000 acres (5.665 hectáreas), con solo un 3% de contención. En conjunto, los incendios han causado la evacuación de al menos 153.000 residentes en Los Ángeles y la imposición de un toque de queda en las áreas afectadas desde las 6 p.m. hasta las 6 a.m.
El meteorólogo de CNN, Chad Myers, explicó que los fuertes vientos de Santa Ana, en combinación con las brasas de los incendios existentes, podrían incrementar significativamente el riesgo de incendios. Además, señaló que estas ráfagas podrían forzar la suspensión temporal del uso de aviones cisterna, lo que dificultaría las labores de extinción desde el aire.
“Condiciones de clima muy peligroso para incendios continúan en partes del sur de California, donde los incendios siguen activos”, publicó el sábado por la tarde el Centro de Predicción de Tormentas a través de X, antes conocida como Twitter.
La agencia advirtió que la región experimentará vientos sostenidos de 32 kilómetros por hora (20 millas por hora) con ráfagas que superarán los 64 kilómetros por hora (40 millas por hora), junto con niveles de humedad relativa extremadamente bajos. Estas condiciones pueden intensificar la propagación de los incendios actuales y facilitar la aparición de nuevos focos.
Fuente: Infobae
GG
