Miles de personas en América Latina siguen buscando a sus seres queridos desaparecidos durante las últimas décadas, víctimas de dictaduras, conflictos armados y el crimen organizado.
A pesar del desinterés de los gobiernos, sus familiares continúan la búsqueda con esperanza y determinación.
La búsqueda incansable de los desaparecidos
En países como Argentina y Chile, los casos de desapariciones forzadas han ganado visibilidad internacional. Sin embargo, en naciones como Perú, Colombia y Paraguay, las familias aún lloran a sus desaparecidos mientras luchan por obtener respuestas y justicia.
En Perú, de los 20.000 desaparecidos, solo se han hallado 3.200 restos. Colombia enfrenta un panorama más complejo con 124.000 personas desaparecidas debido a cinco décadas de conflicto armado. Paraguay, con una cifra menor de 500 desapariciones, solo ha logrado recuperar 15 cuerpos.
Colombia: una paz divisiva
El conflicto armado en Colombia dejó más de 450.000 muertos y 124.000 desaparecidos, resultado de enfrentamientos entre guerrilleros, paramilitares, narcotraficantes y el gobierno. A pesar de los esfuerzos por sanar las heridas, la violencia persiste.
El acuerdo de paz firmado en 2016 entre el gobierno y las FARC permitió la creación de instituciones como la Comisión de la Verdad, la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) y la Unidad de Búsqueda de Personas Desaparecidas. Sin embargo, las negociaciones actuales con el Ejército de Liberación Nacional (ELN) enfrentan obstáculos, y la violencia sigue escalando.
Paraguay: el legado de Stroessner
El dictador Alfredo Stroessner gobernó Paraguay por 35 años, dejando un legado de 20.000 víctimas de tortura, ejecuciones y desapariciones. A pesar de su derrocamiento en 1989, su influencia sigue presente, con el Partido Colorado aún en el poder.
Las investigaciones sobre los desaparecidos han sido lentas y escasas. Hasta la fecha, solo 15 cuerpos han sido recuperados de las fosas comunes, y el presupuesto destinado a la búsqueda es limitado. Las familias continúan exigiendo verdad y justicia.
Puedes leer: Explosiones dejan al menos 13 militares desaparecidos en Cuba
Perú: dos décadas de insurgencia y represión estatal
Entre 1980 y 2000, Perú vivió un periodo de violencia extrema debido a la insurgencia de Sendero Luminoso y la represión militar. Durante este tiempo, 20.000 personas desaparecieron y más de 69.000 perdieron la vida.
El trabajo de recuperación de cuerpos ha sido arduo y, hasta ahora, solo se han hallado 3.200 restos. La incertidumbre sigue afectando a miles de familias que buscan cerrar este capítulo doloroso de su historia.
La desaparición forzada sigue siendo una herida abierta en América Latina. En Perú, Colombia y Paraguay, las familias de las víctimas siguen luchando por verdad, justicia y reparación. Aunque el camino es difícil, su persistencia refleja la necesidad de mantener viva la memoria y evitar que estos crímenes caigan en el olvido.
Fuente: AP
GP