El sueño de un niño de 9 años de jugar con su equipo favorito, Leones del Escogido fue más allá, ya que décadas después Albert Pujols no solo jugó con el conjunto de su infancia, sino que, como dirigente, cortó la sequía de ocho temporadas sin campeonatos para los melenudos, obteniendo el número 17.
“Si digo que de niño yo esperaba dirigir a mi equipo al campeonato te hablo mentira. Dios siempre tiene un plan para cada uno de nosotros. Lo pudimos lograr con dedicación, trabajo y con un tremendo grupo. Gracias a la directiva, a nuestro gerente y a operaciones por poner un equipo que lo dio todo en el terreno”, dijo Pujols, tras reiterar el orgullo que siente por sus jugadores.
El veterano de 22 temporadas de Grandes Ligas admitió que pensó que el juego estaba perdido cuando vio el batazo de Francisco Mejía hacia el jardín derecho, pero se sorprendió gratamente con la “tremenda jugada” de Sócrates Brito deslizándose para hacer el último out y sellar la victoria.