Por: Ling Almánzar
Fue el 6 de septiembre de 2024 cuando el entonces canciller de Estados Unidos, Antony Blinken, era recibido en el Palacio Nacional por el presidente Luis Abinader. Exactamente cinco meses después, este 6 de febrero, llega al mismo Palacio el señor Marco Rubio, sucesor de Blinken.
Ambos secretarios han llegado con la atención puesta sobre los mismos temas, aunque tengan visiones diferentes, debido al cambio de Gobierno en la Casa Blanca. Esos temas son la migración haitiana, la lucha contra la corrupción y el combate al narcotráfico. Venezuela no puede faltar, por supuesto.
En su visita, por cierto, Blinken anunció que Washington seguiría sancionando y castigando a los funcionarios del régimen de Nicolás Maduro. Se espera que Rubio anuncie la incautación de otro avión del Gobierno venezolano, que está aquí en el país, y que informe de otras medidas.
Otra: Abinader y Blinken, en el Palacio Nacional
Blinken también elogió al Gobierno dominicano por su decidida lucha contra la corrupción, y por auspiciar una justicia independiente en la República Dominicana.
Por supuesto, se habló de la presencia haitiana en RD. Ese mismo tema será abordado por el señor Rubio y el mandatario dominicano. Blinken subrayó, en septiembre, que la crisis haitiana disparaba el éxodo de haitianos hacia la República Dominicana, donde, a su vez, repercutían en el sistema educativo y sanitario del país.
Esta vez, con la visita de Rubio, se destaca que el presidente Donald Trump ha iniciado una recogida masiva de miles de indocumentados en Estados Unidos. Se espera que Rubio manifieste al Gobierno dominicano la posición oficial de Washington en relación con la presencia de haitianos.
En realidad, no es la primera vez que Abinader tenga que lidiar con el canciller de Trump: ya antes, en el primer mandato de ambos, recibió a Mike Pompeo, el primer canciller del presidente republicano, que asistió a su primera juramentación, en agosto del 2020. Ahora, el gobernante dominicano recibe al flamante emisario de Trump.
