Puerto Príncipe, EFE.- El presidente haitiano, Jovenel Moise, reiteró este lunes que el diálogo es la vía más expedita para enfrentar los problemas del país, mientras centenares de opositores exigieron en las calles la renuncia del gobernante.
En un discurso pronunciado en el marco de la conmemoración del 216 aniversario de la batalla de Vertières, que definió la independencia de Francia, el presidente volvió a pedir unidad a los sectores con incidencia en la nación caribeña.
“Las reformas que se llevarán a cabo serán inclusivas; la diáspora tendrá que desempeñar su papel en todos los sectores. La Justicia y la Policía están trabajando para frenar la inseguridad. Estamos trabajando para devolver la paz y la serenidad a las familias haitianas”, dijo Moise.
Moise felicitó la “profesionalidad” de la Policía Nacional, al considerar que la institución “no se deja atrapar por las provocaciones”.
El jefe de Estado admitió que las condiciones de vida de la población haitiana son precarias y manifestó su decisión de iniciar reformas para cambiar las cosas.
“El sistema de explotación está llegando a su fin. Ella hace todo para regenerarse, pero debemos unirnos para evitarlo. La unidad entre los de arriba y los de abajo. Solo hay una manera de resolver el problema y es a través del diálogo”, opinó.
Al reconocer que la pobreza e inseguridad reinan en el país, Moise afirmó que la violencia política y la persecución “no son parte de nuestro vocabulario”.
Asimismo, volvió a arremeter contra el “sistema de explotación” que ha denunciado en varias ocasiones como el causante de los problema del país, al tiempo de agradecer los esfuerzos de la comunidad internacional por ayudar a la población haitiana.
Mientras Moise pedía diálogo, sus opositores tomaron las calles de Puerto Príncipe y ciudades del interior como Les Cayes, Miragoane, Petit Goave, Saint-Marc y Cap-Haitien, para exigir su salida del poder.
En el sector capitalino de Delmas 95, civiles armados atacaron a los manifestantes y al menos resultó herido un periodista de una emisora radial. Los manifestantes denuncian la presunta “represión” que alienta el Gobierno contra las movilizaciones populares.
Las protestas de hoy parecen anunciar otra semana de parálisis total de las actividades.
Durante las últimas 10 semanas las escuelas han estado cerradas, mientras el transporte público y el comercio han quedado paralizados ante las continuas manifestaciones y barricadas ejecutadas por la oposición a Moise, en el poder desde 2017.