Holden Matthews, de 22 años, se declaró culpable este lunes de incendiar tres iglesias en el estado de Luisiana, Estados Unidos, para mejorar su imagen como músico de black metal.
Matthews, hijo del ayudante del sheriff local, confesó haber prendido en fuego tres templos bautistas durante un periodo de diez días en el área de Opelousas entre marzo y abril de 2019. Por estos crímenes, podría ser sentenciado el próximo 22 de mayo a una pena que va de los 10 a los 70 años de cárcel.
Suspected arsonist facing hate crime charges after string of Louisiana black church fires. https://t.co/q0lgOiImrQ pic.twitter.com/hvgQ0jrBXL
— ABC News (@ABC) April 16, 2019
A pesar de que a las iglesias acogían congregaciones predominantemente afroamericanas, los fiscales federales no encontraron una motivación racial detrás de los atentados. Sin embargo, Mathews sí fue imputado por crímenes de odio.
Durante la audiencia celebrada, el acusado declaró haber quemado las iglesias para elevar su estatus como músico de black metal. Además, aceptó haber compartido videos de los incendios en Facebook en un “intento de promoverse dentro de la comunidad” fanática de este género musical.
The damage to the community is incalculable.#LouisianaChurchFires pic.twitter.com/hXfIrKkw5x
— Victoria Brownworth (@VABVOX) April 11, 2019
De acuerdo con Matthews, los siniestros fueron cometidos para emular los actos perpetrados por fanáticos del black metal en Noruega durante la década de los 1990, cuando al menos 50 iglesias fueron atacadas.
Fuente: RT