El primer ministro ruso, Mijaíl Mishustin, aseguró este lunes que en Rusia se ha frenado la incidencia del coronavirus y que la dinámica de la situación epidemiológica es positiva, con menos de 9.000 casos nuevos por primera vez desde el 1 de mayo.
“La situación de la propagación del coronavirus en el país sigue siendo complicada, pero aun así se puede constatar que se ha logrado frenar el incremento de la morbilidad”, señaló el jefe del Gobierno ruso en una reunión telemática del consejo coordinador sobre la COVID-19.
“Según las valoraciones más cautelosas, la dinámica es positiva”, añadió desde el hospital el primer ministro, que contrajo el coronavirus el pasado 30 de abril.
De acuerdo con los últimos datos del centro operativo de lucha contra el coronavirus, Rusia, el segundo país por número de contagios tras EE. UU., alcanzó este lunes los 290.678 contagiados confirmados tras registrar un aumento de 8.926 nuevos casos en las últimas 24 horas.
Un incremento por debajo de los 9.000 casos nuevos no se ha registrado desde el 1 de mayo e indica que la curva de contagios se está aplanando, según el Gobierno.
En total, siempre según las autoridades, en Rusia han fallecido 2.722 personas de la COVID-19.
El primer ministro indicó que, tras el fin el pasado día 12 de las vacaciones obligatorias retribuidas ya son 27 las regiones rusas de un total de 85 que están preparadas para relajar las restricciones impuestas para frenar el coronavirus.
También sostuvo que “más y más personas” están recuperándose y siendo dadas de alta de los hospitales, en total 70.209 personas, de acuerdo con las estadísticas oficiales.
En Moscú, epicentro de la epidemia en el país, con 146.062 casos, en las últimas 24 horas hubo 3.238 nuevos casos, lo que implica el tercer día consecutivo menos de 4.000 adiciones diarias.
La capital registra hasta el momento 1.580 fallecidos, de acuerdo con las autoridades.
Fuente: EFE