Canciller se rehúsa hablar sobre dominicanos secuestrados en Haití

El ministro de Relaciones Exteriores, Roberto Álvarez, se rehusó hablar sobre el secuestro de los hermanos dominicanos Michael Enrique y Antonio Gerer Campusano Féliz, y el haitiano Junior Albert Augusma, quienes llevan más de 72 horas retenidos en Haití.

Al ser cuestionado sobre el tema, el canciller solo se limitó a decir “Hoy estamos aquí recibiendo las vacunas, en otro momento nos referiremos a ese tema”.

Este martes el presidente de la República Dominicana, Luis Abinader, afirmó que su Gobierno está «trabajando» en las gestiones para la liberación de los jóvenes secuestrados el pasado sábado en el vecino Haití, y que «pronto» habrá información sobre el particular.

«El Gobierno está trabajando en eso y van a tener noticias pronto», dijo Abinader a periodistas, a quienes aseguró que «donde quiera que tengan problemas los dominicanos, este Gobierno los va a defender y va a estar detrás de ellos».

El Ministerio de Relaciones Exteriores (Mirex) informó de la llegada al país de dos de los dominicanos, compañeros de los jóvenes secuestrados, que se encontraban en Haití formando parte del equipo de técnicos cinematográficos que realizaba en esa nación trabajos de filmación para una empresa extranjera.

En nombre del MIREX, el viceministro para Asuntos Consulares y Migratorios, Jatzel Román, realizó el recibimiento formal de estos criollos en el Aeropuerto Internacional La Isabela, de quienes se omiten sus nombres por razones de seguridad.

Román explicó que a su llegada los jóvenes se encuentran en buen estado de salud y fueron conducidos por las autoridades para fines de la investigación correspondiente.

El ministro de Defensa, Carlos Luciano Díaz Morfa,  aseguró que las autoridades dominicanas han apoyado al Gobierno haitiano en el proceso de gestión de rescate de los hermano.

Díaz Morfa dijo que todos los organismos de seguridad del Estado están pendientes a lo que está pasando a los dos técnicos raptados el sábado cuando regresaban de una filmación en Puerto Príncipe, capital haitiana.