Por Escarlin Pozo.- Las ocasiones en la que los titulares de distintos medios han estado sellados por las palabras “vigilante se suicida o es encontrado muerto”, en su lugar de trabajo, han sido diversas.
Desde el 2018 hasta la fecha, según reportes periodísticos, se han registrado siete de estos casos, añadiéndose uno en el que el responsable del hecho no atentó contra su vida.
Tres de estos sucesos ocurrieron en el Distrito Nacional y los demás en Santiago, Bonao, San José de las Matas y San Francisco de Macorís.
Los problemas económicos, sentimentales y de alcoholismo han sido el motor principal de estos hechos, según versiones obtenidas.
Vigilantes que se han suicidado
El caso más reciente tuvo lugar en una institución bancaria, del Distrito Nacional, el pasado sábado.
El hoy occiso, identificado como Príamo Matos Pérez, de 57 años, fue hallado muerto esa mañana por su compañero de relevo.
La médico forense, Magdalena Pérez, precisó que Matos presentaba una herida de bala en la boca que le destrozó el rostro.
Según información brindada por un familiar, Príamo Matos estaba pasando por una situación difícil, pues días anteriores su pareja había cancelado la celebración de su boda.
Un hecho similar, aunque ocurrió fuera del trabajo del victimario, sucedió en Santiago, donde un vigilante mató de un disparo a su expareja y luego se suicidó con el arma que era propiedad de la empresa en la que laboraba.
Muertes de años anteriores
Josué Pascual Alejo, de 27 años, acaparó la atención de la ciudadanía al conocerse la pavorosa acción que cometió en septiembre del 2020: dar muerte de un disparo a dos de sus compañeros de trabajo y a un agrónomo en una empresa tabacalera en la que laboraba, en Bonao.
Luego de cometer el hecho confesó a las autoridades que ese día no quería trabajar debido al estado de ánimo que tenía, luego de haber perdido mucho dinero en juegos de azar.
En octubre de 2019, un guachimán de 65 años se mató de un disparo con una escopeta calibre 12, marca Maverick, propiedad del negocio donde trabajaba en Cerro Hermoso, de San José de las Matas.
Un hecho en plena labor y a la luz del día
Eran las 6:00 de la mañana cuando Francisco Castillo Coronado, de unos 55 años, se propinó un disparo en la misma puerta de la institución bancaria en la que laboraba, ubicada en avenida Máximo Gómez.
Otro acontecimiento que acaparó la atención y desató la opinión pública fue el suceso ocurrido en el estacionamiento soterrado de Caribe Tours, de la avenida 27 de febrero, donde un vigilante mató a su esposa y luego acabó con su vida. El hecho ocurrió el 29 de enero del 2019.
El dos de febrero, pero del 2018, se registró uno de estos casos en Francisco de Macorís, donde un miembro de seguridad ultimó de un cartuchazo a su supervisor y luego de suicidó.
Según versiones, Víctor Hernández, de 21 años, se había presentado al trabajo en estado de embriaguez, no siendo la primera ocasión en la que llegaba así, y al ser amonestado por su supervisor escenificó este hecho.
Suicidio en República Dominicana
Según datos suministrados por el Ministerio de Salud Pública, a través de su departamento de Salud Mental, las estadísticas que se manejan en el país establecen que las causas más comunes de suicidio son:
- Asuntos pasionales
- Dificultades de salud
- Problemas económicos
- Condiciones de salud mental
Revelaron, además, que la cifra de suicidios que se maneja en el 2019 es de unos 349 casos entre los meses de enero y agosto.
En este mismo período, pero del 2020, se cuantificó un aumento de 17 nuevos casos.
Ante estas cifras, las autoridades hicieron un llamado a la población apoyar a las personas que pudieran estar pasando por una situación de depresión y otras circunstancias a nivel emocional.
