La canciller alemana, Angela Merkel, llegó este jueves a la Casa Blanca para reunirse con el presidente estadounidense, Joe Biden, que quiere acercar posturas con ella sobre la relación con China y el gasoducto Nord Stream 2, que unirá Rusia y Alemania por el mar Báltico.
Merkel es la primera gobernante europea a la que Biden recibe en la Casa Blanca desde que llegó al poder en enero, y su visita llega poco antes de que abandone la política activa, algo que hará tras las elecciones federales de septiembre en Alemania.
“Es un gran placer recibir a la canciller Merkel en la Casa Blanca, ella ya ha estado muchas veces en el Despacho Oval. Es una gran amiga, una amiga personal y una amiga de los Estados Unidos”, dijo Biden a los periodistas al comienzo de la reunión.
Preguntado por un periodista alemán, el presidente estadounidense añadió que espera visitar Alemania “pronto”.
Merkel, por su parte, confió en “profundizar en la relación” con Estados Unidos, y recordó “la contribución” de ese país para lograr “una Alemania libre y democrática”.
Ambos líderes tenían previsto reunirse primero a solas, luego acompañados de sus respectivos equipos y después ofrecer juntos una rueda de prensa, antes de compartir una cena en la Casa Blanca.
El principal objetivo de Biden es “agradecer” a Merkel “el papel de liderazgo” que ha asumido en Europa y todo el mundo, ahora que se “prepara para abandonar el escenario político alemán”, explicó una funcionaria estadounidense en una rueda de prensa telefónica.
No obstante, la visita servirá para avanzar en temas que preocupan a ambas potencias, como el combate a la crisis climática y la respuesta a la pandemia de la covid-19, así como sus consecuencias económicas, apuntó la fuente.
Los dos líderes publicarán una “declaración de Washington” en la que detallarán los principios que esperan que guíen la cooperación bilateral en los próximos años, y darán pasos para “lanzar una alianza sobre el clima y la energía” para hacer frente a la crisis climática, indicó la funcionaria.
Biden aprovechará además para reiterarle a Merkel sus “preocupaciones” en torno al gasoducto Nord Stream 2, actualmente en construcción y que podría permitir a Moscú desechar la ruta de tránsito de gas a través de Ucrania.
El otro tema que promete acaparar parte de la agenda es la voluntad de Biden de conseguir un respaldo más claro de Europa en su competición estratégica con China, algo que ha incomodado a Alemania, que no quiere tener que elegir categóricamente entre relacionarse con Washington o con Pekín.
Merkel ya se reunió a primera hora de este jueves con la vicepresidenta estadounidense, Kamala Harris, que la recibió en su residencia para un desayuno de trabajo antes de que la canciller se reuniera con representantes académicos y se desplazara a la Casa Blanca.
EFE