Ernesto Rodriguez.- Este jueves los ánimos se caldearon entre legisladores que conocían en una reunión de la comisión bicameral la propuesta de UNICEF de eliminar del borrador del Código Penal la permisión de la disciplina violenta contra los niños.
Desde fuertes discusiones, hasta denuncia de recibir presión por parte de organismos internacionales, fue lo que caracterizó la reunión bicameral que estudia el proyecto para modificar el artículo 123, Ley 24-97 de violencia intrafamiliar y la Ley 136-03 sobre el Código para la Protección de los Derechos de los Niños, Niñas y Adolescentes.
El diputado del PRM, Amado Díaz, entiende que la formación de un niño es una desición individual de cada familia y que el mismo no debe ser parte de una legislacin.
“Es lamentable que organismos internacionales esten trazandole pautas al Congreso” indico Díaz.
Mientras, Darío Zapata manifestó que los legisaldores no deben dejarse “arrastrar ni dejarse provocar” por intereses de organismos internacionales.
A su vez, denuncio que algunos legisladores estan siendo presionados los intereses de organismos interionales.
“El articulo 123, el parrafo 2, ellos (organismos internacionales) quieren que se elimine, que los padres y tutores queden excenptos de sanciones si hay algun tipo de desobediencia” expresó.
Agregó: “No voy a complacer, ni al Unicef, ni a los organismos internacionales” dijo el legislador quien ademas pidió a estos leer el articulo completo.
De su lado, el diputado Víctor Suarez, quien se retiró de la reunion que llevaba a cabo la comisión bicameral, entiende que al Código Penal “siempre se le buscará razones para detenerlo en el Congreso”.
Otra postura la tiene el legislador Jesús Ogando, quien considera que si no hay violencia fisica o psicólogico contra el niño, no existe violencia intrafamiliar.
Dijo ademas que organismo internacionales quieren regular hasta la forma de cómo hablarle al niños.
“No le podemos quitar esa facultad a los padres de dirigir y orientar su familia” dijo.
El tema provocó la reacción ayer de la primera dama, Raquel Arbaje, quien cree que la “aprobación de la disciplina violenta en el proyecto de Código Penal es un retroceso en la protección de los derechos de la niñez y adolescencia.”
