Dos procuradores adjuntos y tres jueces se comparten el liderazgo en las investigaciones y conocimiento de los más variados casos y de alto nivel que se ventilan en la Justicia.
Sus nombres siempre suenan y son famosos porque arropan los medios de comunicación por ser las cabezas visibles a la hora de conocer los expedientes que acaparan la atención social.
La jefa del Ministerio Público es la procuradora Miriam Germán Bito, pero la persecución del delito recae en los procuradores adjuntos Yeni Berenice Reynoso, directora de Persecución de la Corrupción y Wilson Camacho, director de la Procuraduría Especializada de Persecución dela Corrupción (Pepca), quienes forman el epicentro de las investigaciones en casos de corrupción, lavado de activos, narcotráfico, funcionarios o figuras muy conocidas.
Mientras que los jueces que más se demarcan en cada jurisdicción son: Kenya Romero, coordinadora de la Oficina de Atención Permanente del Distrito Nacional; Isis Muñiz, de la Cámara Penal de la Corte de Apelación del Distrito Nacional y Napoleón Estévez, juez de la Suprema Corte de Justicia, designado para casos especiales.
MINISTERIO PÚBLICO AL ATAQUE. El Ministerio Público tiene una agresiva ofensiva contra casos de corrupción de la presente y pasada administración, así como también con sonados casos de lavados de activos y narcotráfico internacional.
Reynoso y Camacho han estado al frente de las investigaciones por asociación de malhechores y estafa al Estado en las operaciones Antipulpo, Medusa, Caral, Coral 5G, todos pertenecientes a la pasada administración y sobre los cuales se anotan a favor, que ya lograron medida de coerción, las mayorías entre 18 meses y un año de prisión preventiva, afectando el grueso de los vinculados.
El MP también logró prisión preventiva contra los vinculados en la Operación 13; el exadministrador de la Lotería Nacional Luis Maisichell Dicent y demás involucrados en el fraude orquestado con el número 13, en el sorteo del primero de mayo.
Además, Reynoso y Camacho están al frente de los casos de lavado de activos y narcotráfico internacional denominados Operación Falcón y Operación Larva.
Tienen en agenda, concluir investigaciones que involucran a funcionarios del PRM y exfuncionarios del PLD.
DE VARGAS A ROMERO. El juez Alejandro Vargas era el magistrado por excelencia que por años conoció las medidas de coerción de los más sonados casos.
Con su ascenso al Tribunal Constitucional, cedió el mallete a Kenya Romero, quien ahora es la magistrada más conocida del sistema.
Romero se estrenó por todo lo alto con el conocimiento de medida de coerción en la denominada Operación Coral, entramado societario militar-religioso, encabezado por el exdirector del Cuerpo Especializado de Seguridad Presidencial y jefe de escoltas de Danilo Medina, mayor general Adán Cáceres. La audiencia fue transmitida en vivo por medios de comunicación y acaparó la atención nacional. La jueza se lució.
Prosiguió con la Operación 13, Medusa y Coral 5G.
JUEZ ESPECIAL. Napoleón Estévez fue designado por la Suprema Corte de justicia para investigar, en jurisdicción especial, a cuatro legisladores vinculados en diferentes casos de narcotráfico internacional y lavado de activos.
Estévez fue apoderado para ser juez de instrucción especial y conocer los procesos contra los congresistas Nelson Marmolejo Gil (PRM-Santiago), Faustina Guerrero Cabrera (PRM-El Seibo) y Héctor Darío Feliz Feliz (PRD-Pedernales), en la denominada Operación Falcón.
También fue apoderado para conocer en la misma calidad sobre las acusaciones que formula el Ministerio Público de La Vega contra Rosa Amalia Piularte (PRM-La Vega), vinculada junto a su esposo Miky López de encabezar una red de narcotráfico internacional y lavado de activos que alegadamente movilizó más de dos mil 500millones de pesos en el sistema financiero nacional.
JUEZAS ISIS MUÑIZ. El nombre de la magistrada comienza a sonar insistentemente con las apelaciones y las recusaciones formuladas a otros jueces, desprendida de los cinco grandes casos de corrupción destapados en este 2021, lo que implica que su nombre será muy famoso con las apelaciones que eventualmente se desprenderían de los mismos en el futuro próximo.
La jueza Muñiz, de la Tercera Sala Penal de la Corte de Apelación del Distrito Nacional fue la apoderada y conoció sobre la apelación que interpuso la jueza Margarita Cristo Cristo, quien acusó a la magistrada Yeni Berenice Reynoso, de incurrir en el delito de ultraje y violencia verbal.
Cristo Cristo presentó un recurso de apelación luego que la Corte de Apelación del Distrito Nacional archivara la querella presentada en contra de Reynoso.
También conoció de la apelación, en la Segunda Sala Penal de la Corte de Apelación del Distrito Nacional, a los implicados en el caso Anti Pulpo que buscaban revocar la presión preventiva dictada en la medida de coerción.
El tribunal lo integraban, además, Julio Cesar Canó Alfau y José Jiménez Rosa,
Alexis Medina, hermano del expresidente Medina y el principal acusado en la Operación Antipulpo, buscaba que le variaran la medida de coerción por 18 meses de prisión preventiva, pero le fue denegado.
La magistrada Muñiz, de la Segunda Sala Penal de la Corte de Apelación del Distrito Nacional, también conoció y rechazó la recusación que presentó en contra su colega Kenya Romero, la defensa del general Julio Camilo de los Santos Viola, que solicitaba que se designara a otro juez para la audiencia de conocimiento de medida coerción por el caso Coral 5G, alegando que estaba predispuesta.
La jueza Romero fue confirmada por el tribunal de alzada para conocer la audiencia de medida de coerción de la Operación Coral 5G, casi tres semanas después de que fueran arrestados el general Juan Carlos Torres Robiou y los otros 12 imputados.
