Dos residentes de un remoto pueblo montañoso en la isla italiana de Cerdeña, Vittorio Lai, que cumplió el pasado sábado 100 años, y Piuccia Lai, que también se convertirá en centenaria la próxima semana, hicieron que su patria chica batiera un récord mundial de longevidad al elevar a diez el número de personas con más de un siglo de vida en la localidad, con una población de tan solo 1.765 habitantes, informan medios locales.
Cerdeña se encuentra entre las cinco regiones del mundo con una mayor concentración de centenarios. En la isla viven 534 personas que tienen 100 años o más, lo que equivale a 33,6 por cada 100.000 habitantes, según The Guardian.
A su vez, el pueblo de Perdasdefogu, al que solo se puede acceder por una estrecha y sinuosa carretera, es un lugar emblemático debido a su elevado número de residentes centenarios, que es 16 veces superior a la media nacional.
“La presencia de diez centenarios confirma la excepcional longevidad de los habitantes de Perdasdefogu”, afirma Luisa Salaris, profesora de demografía de la Universidad de Cagliari.
La habitante más longeva registrada en el pueblo hasta la fecha es Consolata Melis, quien falleció en 2015 a los 108 años de edad. Actualmente, el residente vivo más viejo de Perdasdefogu es Antonio Brundu, que cumplirá en marzo 104 años.
Varios científicos estudiaron el remoto pueblo y señalaron diferentes factores para explicar la singular longevidad de sus habitantes, entre ellas el aire limpio, un estilo de vida activo y una dieta rica en verduras crudas.
RT
