El exembajador de Haití en República Dominicana, Edwin Paraisón, y el economista Henri Hanrad, proyectaron que en breve tiempo se produciría una crisis de impredecibles consecuencias en la vecina nación, atribuida a la deuda por la factura petrolera que eventualmente se traduciría en una parálisis en el despacho por parte de suplidores y por ende, degeneraría en desabastecimiento.
Paraison y Hebrad, entrevistados por separado por N Digital, ven como única salida que las autoridades haitianas procedan de inmediato a actualizar gradualmente el precio de los combustibles, para ponerlo a la par de las cotizaciones en los mercados internacionales.
Haití vende gasolina y gasoil más barato que el precio de compra, debido que tiene más de un año sin actualizar los precios. Un galón de gasolina cuesta dos dólares con 25 centavos y el de diésel, tres dólares con 30 centavos, cuando los precios de carburante superan los cuatro dólares el galón, en los países no productores de petróleo.
¿Por qué Haití vende gasoil y gasolina mucho más barato que RD?
“Haití tendría una situación muy explosiva para el próximo semestre. Tendría una combinación fatal de falta de combustibles y posiblemente de alimentos que lo coloca en una situación y muy preocupante”, afirmó el economista y consultor empresarial.
Hebrard estima que la situación es peor porque a las autoridades tener tanto tiempo sin actualizar precios, cada intento de reajustarlos produce disturbios sociales en las calles.
“No hay capacidad para traspasar los aumentos al consumidor y no hay capacidad financiera para mantener los subsidios”, sostuvo.
PLAN DE REAJUSTE GRADUAL. Mientras que Paraisón plantea que es enorme el endeudamiento nacional porque el Gobierno mantiene cierto subsidio, vendiendo combustibles más barato que los precios fijados en los mercados internacionales, lo que estima traerá consecuencias desagradables.
Estima que bajo las actuales circunstancias, todo apunta a un desabastecimiento inevitable y consecuentemente en catástrofe, cuando se llegue al punto de no poder pagar los despachos a los suplidores.
“Es predecible y se vislumbra problemas sociales por la incapacidad del Estado haitiano de poder cumplir compromisos financieros con proveedores”, sostuvo el exdiplomático.
Por tal motivo, plantea la necesidad de planificar un reajuste gradual de los precios de los combustibles, parecido a como lo hace República Dominicana con la Ley de Hidrocarburos.
Recordó que no sería bueno equiparar de golpe los precios de los carburantes con el mercado internacional, como hace años sugiere el Fondo Monetario Internacional, porque acarrearía una situación de inestabilidad.
“Se debe planificar de manera estratégica. Hace cuatro años, cuando el FMI sugirió reajustar los precios y se iba hacer de manera tan brusca, que creo una situación difícil de manejar”, indicó Paraisón.