Puerto Príncipe (EFE).- Las embarazadas y las niñas son los grupos más afectados por la crisis alimentaria que padece Haití, donde pasan hambre 4,3 millones de personas de una población total de unos 11 millones, informó este miércoles la organización humanitaria y de desarrollo Plan Internacional.
Esto se debe, según la entidad, a que no tienen medios económicos para sobrevivir, lo que las hace vulnerables a todo tipo de violencia (física, verbal, psicológica y sexual) y muchas madres que son cabeza de familia, con hijos en período de lactancia y embarazadas, sufren desnutrición.
Algunas incluso se ven obligadas a mantener relaciones sexuales como único medio de subsistencia, indicó Plan en un comunicado de prensa.
Locita, madre soltera de 24 años que vive con su padre y su hijo de 3 años en una casa de una sola habitación y comparte la cocina con otras personas de la zona, es ejemplo de la situación de muchas mujeres.
“Estoy embarazada y estoy desnutrida, porque no consigo comida. A veces no como nada durante un día, compro comida a crédito o los vecinos me dan algo de comer, pero tengo que dársela a mi hijo porque no tiene el mismo nivel de resistencia que yo”, explicó.
Según la última actualización de la Clasificación Integrada de la Fase de Seguridad Alimentaria (CIF), 4,3 millones de personas en Haití se enfrentan al hambre, cerca del 40 % de su población, con un 22 % de menores con desnutrición crónica, lo que lo convierte en el país con mayor crisis alimentaria en América.
Los habitantes de Haití son los octavos del mundo que más hambre padecen y tienen uno de los niveles más altos de inseguridad alimentaria como consecuencia de la inestabilidad política, económica y social de los últimos años, agravada por el asesinato del presidente Jovenel Moïse en julio de 2021 y el terremoto de 7,2 grados que sacudió el sur del país un mes después.
La violencia de las pandillas, la inseguridad alimentaria o los disturbios civiles, entre otros problemas, se ven agravados por el aumento de los precios de los alimentos, el combustible y los fertilizantes debido al conflicto en Ucrania y a la pandemia de covid-19.
La directora regional de Plan Internacional para América Latina y el Caribe, Débora Cóbar, afirmó que “las niñas están ahora entre las principales víctimas de la situación política y de la inseguridad en Haití”.
“Cuando las familias pasan hambre, las niñas suelen verse obligadas a cuidar de sus hermanos menores para que los padres puedan trabajar o encontrar comida. Con demasiada frecuencia, se ven obligadas a abandonar la escuela, lo que pone en peligro su futuro y aumenta el riesgo de violencia”, apuntó.
Haití está entre los ocho países del mundo que Plan Internacional ha declarado en alerta roja debido a la crisis del hambre junto a Kenia, Etiopía, Somalia, Sudán del Sur, Malí, Burkina Faso y Nigeria.