La Presidencia ucraniana calificó de “chantaje” la convocatoria de referéndum lanzada este martes desde la autoproclamada república separatista de Lugansk y prometió que “eliminará” esa amenaza rusa, surgida del “miedo a la derrota”.
“El enemigo tiene miedo y manipula primitivamente”, afirmó el jefe del gabinete de la Presidencia, Andriy Yermak, a través de su cuenta en Telegram, tras el anuncio lanzado desde Lugansk, al que se unieron a continuación representantes prorrusos de las regiones de Zaporiyia y Jersón.
Yermak acusó a Rusia de recurrir a amenazas como las convocatorias de referéndum y la movilización general de los varones rusos y de no saber combatir más que contra “niños y civiles”.
Sin embargo, afirmó, Ucrania “resolverá” el problema ruso y subrayó que las “amenazas” de Moscú sólo pueden ser eliminadas “por la fuerza”.
El ministro de Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, manifestó por su parte que los “pseudorreferéndum” no cambiarán nada, al igual que no lo hará ningún tipo de movilización.
“Rusia es y sigue siendo un agresor que ocupa ilegalmente partes de Ucrania”, escribió en su cuenta de Twitter y subrayó que por ello Kiev “seguirá liberando” sus territorios independientemente de lo que diga Moscú.
Las autoridades de las autoproclamadas repúblicas populares de Donetsk y Lugansk anunciaron este martes la celebración de un referéndum de adhesión a Rusia que durará varios días y comenzará el próximo 23 de septiembre.
Poco después se sumaron al anuncio las autoridades instaladas por Rusia en las regiones ucranianas de Zaporiyia y Jersón (sureste), ninguna de las cuales están bajo control total del Ejército ruso.