La compañía estatal Unión Eléctrica (UNE) pronostica que cerca del 36 % de Cuba tendrá apagones durante la tarde-noche de este sábado.
Ello es parte de la crisis energética por la que atraviesa Cuba desde hace meses y que se complicó más luego del paso del huracán Ian a finales de septiembre. En algunos puntos los apagones son de hasta doce horas diarias.
La UNE prevé que la capacidad de generación eléctrica en el horario de mayor consumo sea de 2.049 megavatios (MW) para una demanda máxima de 3.100 MW.
El déficit -la diferencia entre oferta y demanda- será de 1.051 MW, el 51 % de la capacidad de generación máxima.
La afectación -lo que se desconectará realmente- será de 1.121 MW, de los que la UNE atribuye 50 a los daños ocasionados por Ian.
Los apagones -por roturas y fallos en las anticuadas plantas termoeléctricas, la falta de combustible y los mantenimientos programados- son habituales desde hace varios meses en Cuba.
Siete de las ocho centrales terrestres tienen más de 40 años, cuando la edad media de estas infraestructuras es de 30.
El Gobierno cubano anunció en septiembre que pretende reducir los apagones antes de finales de este año con reparaciones y nuevas inversiones.
Entre julio y septiembre solo se registraron dos días sin cortes del suministro, según los datos de la UNE cotejados por EFE.
Los cortes en el suministro lastran todos los ámbitos de la economía y afectan de forma notable la vida diaria de los cubanos, lo que está azuzando el descontento social en un país que atraviesa una severa crisis económica desde hace dos años.
Desde julio se han registrado protestas en todo el país por este motivo, que se han incrementado en los últimos días a raíz de los efectos de Ian en el sistema eléctrico nacional.
Los apagones fueron uno de los principales motivos tras las protestas contra el Gobierno del 11 de julio del año pasado, las mayores en décadas.
EFE