La joven que denunció al futbolista Dani Alves por violarla en la discoteca Sutton de Barcelona ha presentado un recurso ante la jueza instructora en el que rechaza ser examinada por el psicólogo particular que propone la defensa del exjugador del FC Barcelona para determinar si su relato y sus síntomas son compatibles con una agresión sexual.
La abogada de la víctima, Esther García, ha presentado el recurso contra la decisión de la jueza de permitir la pericial que propone el abogado de Alves, Cristóbal Martell según han informado fuentes jurídicas a Efe. Este acordó que la joven fuera examinada tanto por un forense independiente del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses como por un psicólogo contratado por Alves. García considera que es suficiente con la exploración que lleve a cabo el forense. La Fiscalía también ha recurrido la decisión de la titular del juzgado de instrucción número 15 de Barcelona.
El examen psicológico de la víctima, prueba indispensable en los casos agresiones sexuales para determinar si lo relatado por la víctima y los síntomas que presenta son compatibles con haber sufrido una violación, sigue de momento suspendido, a la espera de que la jueza resuelva sobre los recursos presentados. Martell pretende ahondar en su tesis de que la denuncia de la víctima adolece de una “distorsión narrativa”, no solo solicitó al juzgado una pericial de parte, sino que la exploración psicológica de la joven fuera grabada en vídeo. Tanto la Fiscalía como la acusación particular ejercida por la denunciante se opusieron a la grabación de la exploración psicológica, que consideran insólita en el ámbito penal, y la jueza instructora acabó por rechazarla, negativa que motivó a su vez un recurso de la defensa.
La instrucción de la causa por presunta agresión sexual, ocurrida en un reservado de la discoteca Sutton de Barcelona el pasado 30 de diciembre, permanece así encallada a la espera de que la justicia dirima la discusión sobre las pruebas periciales, aunque ya se han practicado las principales diligencias, como las declaraciones de testigos y el análisis de las pruebas biológicas.
La defensa de Alves podría volver a pedir en cualquier momento la puesta en libertad provisional del futbolista -que lleva ya dos meses en prisión preventiva-, aunque no lo ha hecho de momento. De la instrucción del caso no ha aflorado ningún elemento nuevo en el que fundamentar su petición de excarcelación. De hecho, puede haber perdido fuerza uno de los principales argumentos en que la defensa se basó para justificar que no hay riesgo de fuga en el deportista brasileño: el arraigo con el que cuenta por estar empadronado en Esplugues de Llobregat (Barcelona) y estar casado con una española. Hace una semana, sin embargo, su esposa, la modelo Joana Sanz, anunciaba a través de las redes sociales su intención de separarse del futbolista, con el que ha estado ocho años casada.
Fuente: El País