Israel se enorgullece hoy de la efectividad de sus defensas antiaéreas tras enfrentar un ataque sin precedentes por parte de Irán. El país logró interceptar con la colaboración de sus aliados más del 99% de los más de 300 drones y misiles lanzados hacia su territorio.
Las tensiones regionales se mantienen elevadas, alimentando temores de una posible escalada en caso de un contraataque israelí.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció la convocatoria de una reunión del Grupo de las Siete democracias desarrolladas para coordinar una respuesta diplomática al ataque iraní, subrayando la preferencia por una solución no militar.
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Origen del ataque
El ataque iraní fue una respuesta a un incidente atribuido a Israel, que resultó en la muerte de dos generales iraníes en un edificio consular en Siria.
Se reportó que Irán lanzó 170 drones, más de 30 misiles de crucero y más de 120 misiles balísticos el domingo por la mañana, marcando la primera agresión militar directa de Irán contra Israel en décadas de enemistad.
Israel ha desarrollado a lo largo de los años una sólida red de defensa antiaérea con la ayuda de Estados Unidos, capaz de interceptar diversas amenazas, desde misiles de largo alcance hasta drones y cohetes de corto alcance. Esta red, combinada con la colaboración internacional, frustró lo que podría haber sido un ataque devastador.
Las autoridades israelíes celebraron la respuesta exitosa al ataque, destacando que se interceptaron más del 99% de las amenazas. A pesar de algunos daños menores y heridos, Israel anunció la reapertura de su espacio aéreo, aunque se mantuvieron ciertas restricciones, como el cierre de escuelas.
Israel enfrenta un panorama desafiante, pero su respuesta efectiva al ataque iraní refleja la fortaleza de sus defensas y la cooperación internacional en la región. Mientras tanto, la comunidad internacional, liderada por Estados Unidos, busca una solución diplomática para evitar una escalada militar.
