La tarde de hoy, en la revisión obligatoria de la medida de coerción impuesta a Emmanuel Rivera y otros seis imputados de la denominada Operación Nido, una supuesta red de estafadores inmobiliarios, estafados expusieron en el estrado sus relatos de la estafa por parte de la “empresa” Indisarq Group.
“Cuando yo pagaba que hacia un deposito de medio millón de pesos, él decía, usted es una clienta VIP, porque los pagos eran de medio millón cada dos meses que yo le depositaba. Yo le hice un pago de 6 millones de pesos desde el 2022 hasta el 2023, 6.3 millones de pesos”.
La testigo contó que cada vez que realizaba el depósito, el hijo era el primero en supervisarlo y luego pasaba por la hermana de Emmanuel Rivera, Mirna Catalina Rivera Ledesma, quien aseguró que ella pertenecía a la parte administrativa y ella autorizaba a Juan Omar Rosario López a hacer los recibos.
“Nosotros exigimos que no se le varíe la medida de coerción porque hay mucho daño emocional, uno trata de mantenerse fuerte pero no es tan fácil”, concluyó la mujer.
Otra de las querellantes, una mujer de avanzada edad, testificó que estuvo haciendo las transacciones todos los meses en las cuentas a nombre de los hijos del cabecilla pero que en ocasiones iba personalmente a la oficina a realizar los pagos y lo entregaba al contable Juan Omar Rosario López.
“Cuando yo veía que no había ningún adelanto yo le decía, ¿Omar y que pasa?, a lo que me dijo, que estaba en la espera del presidente de la República que dará el primer picazo“.
La señora afirmó que siempre tenían una excusa, luego le dijeron que el presidente ya no daría el primer picazo, o que era un asunto de Obras Públicas o sino eran los ascensores ahora es que iban, hasta que se dio cuenta que era una estafa por parte de una llamada de su hijo luego de ver el trabajo realizado por la periodista Nuria Piera.
