La salvia, conocida científicamente como Salvia officinalis, es una planta aromática que es valorada desde la antigüedad por sus propiedades medicinales y culinarias. Originaria de la región mediterránea, sus hojas tienen un sabor distintivo y una fragancia refrescante, lo que la convierte en una adición popular en la cocina. Además de su uso gastronómico, posee cualidades terapéuticas, en especial cuando se prepara en forma de infusión.
El té de salvia se utilizó tradicionalmente para aliviar una variedad de malestares. Es conocido por sus propiedades antiinflamatorias y antimicrobianas, lo que lo hace ideal para promover la salud general y el bienestar. Prepararlo es sencillo, requiere poco tiempo y el resultado es una bebida que no solo es reconfortante, sino también beneficiosa para el organismo.
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¿Cuáles son los beneficios del té de salvia para la salud?
Esta infusión, elaborada a partir de las hojas de la planta de salvia, se destaca por sus efectos antioxidantes gracias a sus compuestos fenólicos y flavonoides. Estos componentes protegen a las células del estrés oxidativo, causado por los radicales libres en el organismo, que genera inflamación y el envejecimiento prematuro de los tejidos. En un estudio se detalla que el consumo de esta infusión durante 2 semanas mostró una mejora en el hígado con respecto a su “estado antioxidante”.
En el mismo análisis se explica que tiene potencial para regular los niveles de colesterol, y que la planta tiene componentes antibacterianos que podrían proteger al organismo ante ciertos patógenos. Además, la salvia es rica en nutrientes esenciales como vitaminas y minerales, que apoyan al sistema inmunológico y promueven el bienestar general.
¿Cómo ayuda el té de salvia a reducir los niveles de azúcar?
Un estudio resalta el posible efecto positivo de la salvia para controlar los niveles de azúcar en sangre. A partir de la observación de un grupo de ratones que tomaron té de salvia en lugar de agua durante 14 días, los científicos concluyeron que la infusión tiene efectos similares al medicamento metformina.
“Los resultados actuales parecen indicar que el té de salvia no posee efectos antidiabéticos a este nivel. Sin embargo, sus efectos sobre los niveles de glucosa en ayunas en animales normales y sus efectos similares a los de la metformina sobre los hepatocitos de rata sugieren que la salvia puede ser útil como complemento alimenticio en la prevención de la diabetes mellitus tipo 2 al reducir la glucosa plasmática de individuos en riesgo”, comentaron los expertos.
Según el portal de los National Institutes of Health de Estados Unidos, MedlinePlus, la metformina actúa al disminuir la cantidad de glucosa que produce el hígado y la cantidad que absorbe el organismo de los alimentos. Se deben realizar más estudios para corroborar esta posible propiedad del té de salvia en las personas.
¿Cómo ayuda el té de salvia a la memoria?
Un análisis resalta que la salvia contiene una “gran variedad de compuestos activos que pueden mejorar la actividad cognitiva y proteger contra enfermedades neurodegenerativas”. Los componentes que tienen este efecto son los ácidos fenólicos, los flavonoides y los terpenos, todos de ellos antioxidantes. Por ende, la planta puede influir positivamente en la salud cerebral al resguardar al cerebro del estrés oxidativo y la inflamación, factores que pueden afectar la cognición.
Los científicos destacan que “en un modelo animal, S. officinalis previno los déficits de adquisición y memoria inducidos por la diabetes, inhibiendo la peroxidación lipídica y mejorando los sistemas de defensa antioxidante”.
Por otro lado, en personas jóvenes sanas mayores de edad mostró mejoras en el estado de ánimo que tuvieron que ver con la calma, pero también la memoria y la atención. La infusión, al contener los nutrientes y los componentes claves de la planta, tiene el potencial de brindar estos beneficios.
¿Qué enfermedades ayuda a prevenir el té de salvia?
Debido a su acción antioxidante, la salvia puede contribuir en la prevención de enfermedades crónicas causadas por las reacciones inflamatorias. Además, su capacidad de regular los niveles de colesterol puede ayudar a evitar el desarrollo de ciertas afecciones cardiovasculares. Un estudio muestra la manera en la que consumir la infusión durante 4 semanas mejoró el perfil lipídico de los participantes, con niveles más bajos de colesterol “malo” (LDL) en sangre.
Las propiedades previamente descritas sobre el control del azúcar en sangre y la mejora de la memoria, pueden disminuir los riesgos de padecer diabetes tipo 2 y algunos trastornos de cognición y del estado de ánimo.
La salvia también puede fortalecer el sistema inmunológico, ya que ayuda a proteger contra infecciones respiratorias y otras enfermedades comunes. Su incorporación en la dieta puede ser una medida preventiva para mantener una buena salud general.
Si bien su consumo es beneficioso, no debe realizarse en reemplazo de ningún tratamiento médico, sino como acompañamiento siempre y cuando no sea contraindicado por un profesional de la salud. Se deben tener en cuenta las alergias preexistentes y la susceptibilidad a reacciones alérgicas antes de probar la infusión.
Cómo preparar el té de salvia, paso a paso
La preparación del té de salvia es bastante sencilla. Se necesitan hojas frescas o secas de salvia, agua caliente y, opcionalmente, un endulzante natural como miel o stevia. La infusión de las hojas de salvia en agua caliente permite extraer sus propiedades beneficiosas, proporciona un sabor profundo y aromático.
Poner una taza de agua en una olla o hervidor y calentarla hasta que empiece a hervir.
Mientras el agua se calienta, lavar las hojas de salvia frescas si se están utilizando. Si se usa salvia seca, asegurarse de que esté limpia y sin impurezas.
Colocar las hojas de salvia en una taza o tetera y verter el agua caliente sobre ellas.
Cubrir la taza o tetera y dejar que la salvia se infusione en el agua caliente durante unos 5 minutos. Este tiempo puede ajustarse según la preferencia por un sabor más fuerte o más suave.
Después de los 5 minutos, colar las hojas de salvia usando un colador fino y verter el té en una taza.
Si se desea, añadir miel, stevia u otro endulzante natural al té y mezclar bien.
Servir el té de salvia caliente y disfrutar de sus propiedades relajantes y digestivas.
Fuente: Infobae
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