La comunidad de la urbanización Calak 2, en Moca, se expresó indignada tras la reciente inauguración de una fuente en honor al director de Coraamoca, Sandy Méndez, y al director nacional de INAPA, Wellington Arnaud. Mientras se celebran estos actos, los residentes se quejan alegando que enfrentan una grave problemática que ha afectado su calidad de vida durante más de una década.
Según denuncian, el agua que llega a las viviendas no puede ser utilizada para ningún tipo de necesidad, ya que aparentemente se está mezclando el agua de las tuberías con agua pluvial contaminada con heces fecales. Dicen que esta alarmante situación ha provocado enfermedades en los niños, el deterioro de las paredes de las viviendas y el hartazgo general de la comunidad.
“Estamos cansados de esperar. Llevamos 10 años sufriendo este problema y no vemos ninguna solución. Hace dos meses vinieron, abrieron una zanja, y la dejaron así mismo, como si nuestras vidas no importaran”, expresó un residente visiblemente frustrado.
La comunidad señala que mientras las autoridades realizan actos simbólicos para destacar logros, los problemas básicos permanecen ignorados. Los vecinos de Calak 2 exigen una respuesta inmediata y efectiva a esta crisis sanitaria que amenaza su bienestar y el de sus familias.