Por: Luis Cruz Jr.
Hace aproximadamente un año, unas 15 familias quedaron a la intemperie, debido a la destrucción de sus viviendas ubicadas en la parcela 59 de la comunidad de Villa Nueva, provincia Montecristi. Ahora, los afectados procederán judicialmente tras considerar que la acción de desalojo fue ilegal.
El vicepresidente de los derechos humanos en la región Norte, Humberto Román Monción, anunció que someterán ante la justicia al señor Leonel Darío Mesa Familia, quien alegadamente reclama la tierra y habría ocasionado la destrucción de las viviendas, sin una orden judicial. Las familias no fueron notificadas antes del desalojo.
“Y le estamos pidiendo a Miriam Germán y a Yeni Berenice, que tomen cartas en el asunto porque por este problema hay 3 muertos, donde hay hasta nota de voz en la fiscalía de Montecristi y todo eso está tapado”, dijo Román Monción, quien acusó a Leonel Mesa de cualquier cosa que le pueda pasar.
El alcalde pedáneo, Juan Arias, dijo que Leonel Darío Mesa quiere titular la parcela 59 a nombre de él, e hizo un llamado al Tribunal de Tierras tras considerar que le están dando fuerza, ya que dicho señor está deslindando.
“Pero está deslindando, ya ayer quedaron de agrimensura entregarle el expediente al Tribunal de Tierras, por algo está deslindando, alguien lo apoya no sé quién, entonces estamos haciendo un llamado al tribunal de tierra que averigüe bien antes de dar título”, dijo Juan Arias.
El señor Miguel Ángel Pérez Jiménez dijo que se encontraba trabajando y que su esposa, que se encontraba en riesgo en la casa y con 6 niños, la sacaron fuera y no permitieron que sacaran ninguna pertenencia y lo destruyeron todo.
“Metieron la palita no esperaron que sacáramos nada, ni cama ni nada; todo nos destruyeron adentro, yo espero que ahora las autoridades tomen carta en el asunto”, añadió Pérez Jiménez.
El comunitario Antonio Taveras contó que, de repente, vino una comisión a tumbar la casa donde tenía más de 50 años viviendo, por lo que ahora espera la ayuda de las autoridades.
Elido Leclerc, otro de los afectados, dijo que estaba trabajando y cuando le dijeron que le estaban tumbando la casa, y cuando llegó un teniente le dijo que echara para atrás y no lo dejó acercarse a su hogar mientras veía su destrucción.
La parcela 59, ubicada en Guayubín, lleva ocupada más de 100 años y ahora sus moradores temen ser desalojados y que continúen con la destrucción de más viviendas. Por ello, hicieron un llamado al presidente Luis Abinader para que acuda en su auxilio.