El área metropolitana de Puerto Príncipe vivió una jornada de parálisis este lunes, tras las nuevas amenazas del líder de la coalición de bandas Vivre Ensemble (Vivir Juntos), Jimmy Chérizier, conocido como “Barbecue”. Chérizier advirtió sobre posibles ataques a varios barrios de la capital de Haití, lo que desencadenó una respuesta inmediata de las autoridades y generó un ambiente de miedo e incertidumbre entre la población.
Las escuelas cerraron sus puertas, al igual que muchas instituciones públicas y privadas, mientras que el transporte público operó de manera reducida. El comercio también se vio afectado, funcionando a un ritmo muy bajo. En las calles, la ansiedad era palpable, ya que se escucharon intensos tiroteos en distintos puntos de la ciudad, incluido el centro, que lleva casi un año bajo el control de las bandas criminales. Esta situación ha provocado el desplazamiento de miles de personas, que han tenido que huir de sus hogares y refugiarse en campamentos y ciudades de provincias.
La Policía Nacional Haitiana (PNH) se encuentra en alerta máxima desde ayer, luego de que el Ministerio de Justicia emitiera un comunicado en el que alertaba sobre las “amenazas de bandas armadas”. En respuesta, el director general de la PNH, Rameau Normil, dio instrucciones para que las fuerzas de seguridad se mantuvieran en máxima alerta y tomaran medidas para contrarrestar cualquier ataque a la población civil.
Refuerzan las medidas de seguridad
Según un comunicado en la página oficial de la PNH, en la noche del sábado se llevó a cabo una reunión estratégica para evaluar la situación de seguridad, y se reforzaron los dispositivos de seguridad en varias carreteras clave. La Policía también destacó que han operado en las últimas semanas en el centro de Puerto Príncipe, con unidades especializadas, incluyendo la Unidad Temporal Antibandas y la Brigada de Búsqueda e Intervención, con el fin de despejar accesos viales y facilitar el trabajo de las fuerzas de seguridad.
A pesar de estos esfuerzos, se han producido enfrentamientos con los pandilleros, quienes siguen controlando varias zonas de la capital.
El impacto de la violencia en la población
El primer ministro de Haití, Alix Didier Fils-Aimé, presidió el viernes pasado una reunión del Consejo de Gobierno, donde se discutió la creciente inseguridad en el país. Fils-Aimé prometió la adquisición de más recursos para reforzar la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas, además de un aumento en la formación de las fuerzas de seguridad para llevar a cabo intervenciones más rápidas y efectivas.
La violencia, alimentada por las bandas criminales, ha tenido un impacto devastador en la población. Según la Oficina de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, en 2024, al menos 5,601 personas fueron asesinadas debido a las actividades de las bandas, lo que representa un aumento significativo respecto al año anterior. Además, se reportaron 2,212 personas heridas y 1,494 secuestradas.
Con información de EFE.
Por: Yari Araujo