Las enfermedades venosas tienen signos altamente visibles que no pasan desapercibidos por quien los sufre ni tampoco por quien los observa. Si por casualidad no sabes identificarlos, aquí te presentamos una breve descripción.
Factores de riesgo
Frecuentemente la insuficiencia venosa es genética, pero el embarazo y los cambios hormonales pueden favorecer la aparición de trastornos venosos. El alcohol puede influir también dado que relaja los vasos sanguíneos.
La obesidad y los problemas digestivos frecuentes son también factores de riesgo, así como estar parado por mucho tiempo y la falta de ejercicio.
Signos y síntomas de las enfermedades venosas
Los signos visibles de las enfermedades venosas suelen ser posteriores a los cambios internos que ocurren en las venas de las piernas. Las primeras señales de cambios en las venas son las siguientes:
- Cansancio o pinchazos en las piernas
- Tobillos hinchados por las piernas
- Sensación de alfileres o de agujas
- Dolor en las piernas
Posterior a estos signos, está la hinchazón de las piernas por acumulación de agua. Existe un sistema de clasificación llamado el sistema CEAP, que clasifica cada fase del desarrollo de la enfermedad a un determinado estadio según los signos.
- C0: ausencia de signos y síntomas palpables de enfermedades venosas
- C1: venas reticulares
- C2: varices sin signos clínicos de insuficiencia venosa crónica
- C3: varices sin edema
- C4a: varices con cambios tróficos en la piel
- C4b: pigmentación o eccema
- C5: lipodermatoesclerosis o atrofia blanca
- C6: varices con úlcera venosa curada
- C7: varices con úlcera venosa activa
Para prevenir las enfermedades venosas, recomendamos ejercicio físico, para mantenerlas elásticas y sanas.
Fuente: La Opinión
