La yuca es un tubérculo originario del área tropical de América que, aunque se cultiva en condiciones climáticas calurosas, es capaz de adaptarse bien a climas adversos.
Sus raíces o tubérculos se comen como la batata o la patata, solo que esta tiene más de un 90% de almidón en su interior, uno de los hidratos que proporciona, pero es pobre en proteínas y grasas.
Lo que significa que para consumirla hay que combinarla con una dieta que cuente con otros alimentos ricos en vitaminas, minerales y proteínas que puedan suplantar lo que no puede ofrecer la yuca.
Pero, ¿por qué puede mejorar nuestra salud? Sencillo. La yuca es un alimento que genera saciedad, mejora las condiciones metabólicas, ayuda a cuidar el tránsito intestinal y además puede combatir el sobrepeso.
Aunque no tiene una alta densidad nutricional, la yuca es merecedora de un puesto en tu listado de alimentos para la dieta. Se puede cocinar en unos 30 minutos o menos, y puedes comerla al vapor, hervida, al horno, e incluso frita.
La yuca ha sido uno de los alimentos más reductores de hambruna en poblaciones de bajos recursos donde comer bien es un dilema. Además que su riqueza en hidratos la hace importante para todos los que intentamos mejorar nuestra calidad de vida.
Así que ahora ve al mercado por unas cuantas yucas y prepara un estofado o reemplaza a las patatas por ella en tu receta favorita. Como sea y a la hora que sea, la yuca será tu gran aliada.
Fuente: La Opinión