Por Joel Suriel
Divisiones de partidos políticos en el Gobierno y la oposición han dado surgimiento a la creación de nuevos bloques legislativos que dificultan la gobernabilidad, dado el giro que da la correlación de fuerzas en el Congreso Nacional.
Las luchas por el poder de un grupo emergente que desea dar el salto contra los que están al mando, que no quieren dejarse desplazar, conlleva a divisiones irremediables y surgimientos de nuevos partidos y nuevos bloques legislativos.
En esas divisiones, algunos congresistas han renunciado o han sido expulsados de sus partidos, formando así nuevos bufetes legislativos, que haciendo causa común con la oposición, han podido bloquear o retrasar proyectos de interés para el Poder Ejecutivo.
FUERZA DEL PUEBLO. (LFP) es el nombre del nuevo bloque de diputaos y senadores surgidos de la salida de Leonel Fernández y un nutrido grupo de dirigentes del Partido de la Liberación Dominicana.
Por el momento, más de 20 legisladores han dado el salto y ahora precisan de nuevas oficinas, voceros y las demás prerrogativas que conllevan.
Por el momento han publicado renuncias al PLD para formar el Bloque de Diputados de la Fuerza del Pueblo: Demóstenes Martínez, Henry Merán, Juan Carlos Quiñones, Juan Comprés, Marcos Cross, Levis Suriel, Alfredo Rodríguez, Rubén Maldonado, Orlando Espinosa, y Adalgisa Fátima Pujols.
El Bloque de Senadores Fuerza del Pueblo cuenta, por el momento, con los senadores Prims Pujals Nolasco y Manuel Güichardo.
Se espera que en los próximos días, senadores y diputados leonelistas abandonen las filas del partido gobernante y se sumen a los nuevos bufetes legislativos.
El PRD CON MAS DIVISIONES. El Partido Revolucionario Dominicano es la organización que más divisiones ha sufrido y por ende ha permitido el surgimiento de más bufetes legislativos.
Estando en el poder, del PRD surgieron los bloques legislativos del Partido Revolucionario Social Demócrata (PRSD), fruto de la salida del entonces presidente de la organización Hatuey Decamps.
Ovi Saldivar fue el vocero del Bloque de Diputados del PRSD y Ramiro Espino en el Senado.
Estando en la oposición, el PRD sufrió una nueva división, con la salida de un grupo mayoritario que creó el Partido Revolucionario Social Demócrata. Nuevas oficinas fueron habilitadas en ambas cámaras legislativas. Sus voceros actuales son Alfredo Pacheco, en la Cámara de Diputados y Santiago Zorrilla en el Senado.
En 1998 10 diputados del PRD fueron expulsados de ese partido por votar en contra de la línea partidaria para elegir al nuevo presidente de ese hemiciclo que sería Winston Arnaud. Sin embargo, Héctor Rafael Pérez Méndez, con apoyo del PLD y el PRSC, se impuso, dando origen al conocido “Peguerazo”.
Peguero Méndez luego adquirió el Partido Popular Cristiano y algunos de los expulsados se fueron con él.
Algo similar pasó en el 2003, cuando el legislador Alfredo Pacheco fue escogido como presidente de la Cámara de Diputados, contrario a la candidata del presidente de la República en ese entonces, Hipólito Mejía, que prefería a la reformista Rafaela Alburquerque.
Resultado de esta elección, disparos y corte de la energía eléctrica afectaron el desenvolvimiento de la Cámara de Diputados.
En el 1990 se produjo una de las más grandes divisiones del PRD, cuando Jacobo Majluta abandonó la entidad y fundó el Partido Revolucionario Moderno.
Un importante grupo de diputados lo acompañaron y el bloque del PRI tuvo como vocero a Thomás Hernández Alberto y Tony Raful como vice- vocero.
PRSC-UD-PRL. El Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) no escapa a la división partidista por la lucha de poder. Cuando el dirigente reformista Fernando Álvarez Bogaert aceptó la candidatura vicepresidencial de José Francisco Peña Gómez, líder del PRD, varios legisladores del partido rojo se fueron con él, incluyendo el entonces presidente del Senado de la República, José Osvaldo Leger.
Estos legisladores se cobijaron en la organización Unidad Democrática, que presidía Alvarez Bogaert, entidad que ya existía y fue fundada por dirigentes salidos del Partido de la Liberación Dominicano, entre ellos, Luis Acosta Moreta.
La ingobernabilidad afectó el último período de Gobierno, de tan solo dos años, del entonces presidente Joaquín Balaguer.
Amable Aristy Castro se marchó del PRSC y fundó el Partido Liberal Reformista, surgido de un cambio de nombre, tras adquirir La Estructura.