Presentamos también diferentes casos de corrupción que luego fueron confirmados mediante auditorías realizadas por la Cámara de Cuentas. Por ejemplo las irregularidades que se desarrollaron en el Ayuntamiento de La Vega, donde la nómina estaba cargada por familiares de la esposa del Alcalde y una gran cantidad de empleados eran presidentes de comités de base del Partido de la Liberación Dominicana. Además detectamos contratos por alquiler de camiones a funcionarios del gobierno en dicha Provincia.
También tocamos el caso de los Comedores Económicos donde demostramos como esta institución tenía una abultada nómina cargada con pagos a periodistas. Además como una lista de vehículos de lujo que alquilaba haciendo pagos millonarios, violando la disposición del presidente de la República, Danilo Medina, quien había emitido en agosto del 2012 el decreto 499-12 donde prohibía la adquisición de vehículos de cualquier naturaleza como una manera de reducir el gasto público. Pero el colmo de estos alquileres es que confirmamos que esos vehículos no estaban en la institución.
Demostramos además como los Comedores Económicos contrataban a empresas que no estaban autorizadas como proveedoras del Estado. De igual manera denunciamos que el hijo del Director de los Comedores Económicos ostentaba bienes y fortuna a pesar de que su sueldo en Aduanas era de 23 mil pesos, puesto al que tenía seis meses sin acudir y continuaba cobrando.
Otra denuncia que generó impacto fue la relacionada a las Tarjetas Solidaridad, pues logramos testimonios de varios afectados por el cobro de 5 mil pesos mensuales de peajes ante el uso del denominado veriphone, equipo utilizado por colmados y supermercados para cobrar los productos adquiridos con la tarjeta solidaridad. De estos malos manejos con el programa acusaban al director del distrito municipal de Baitoa, Radhamés Rojas.
También detectamos que el método que se utilizaba era visitar a usuarios de la tercera edad, que tenían algún tipo de problema con su tarjeta e informarles que debía llevárselas para arreglarla. Al cabo de unos días, devolvían las tarjetas a los beneficiarios, pero cuando estos iban a utilizarla, se encontraban con la sorpresa de que no tenían fondos.
Otro tema en el que profundizamos en el 2014 fue el caso Bahía de las Águilas, un caso que habíamos investigado a profundidad en el 1997 y que con documentos y testimonios habíamos demostrado la mafia que se ocultaba tras las ventas de los terrenos de esta Bahía. En el 2014 logramos nuevos testimonios que demostraban que estas ventas que se quería alegar era de ¨buena fe¨ no eran más que una vil trama donde participaron funcionarios de varios extractos. Dimos cobertura al caso hasta que finalmente el Estado dominicano gana el proceso legal en el que el tribunal anuló todos los títulos a nombre de particulares.