El expresidente de la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU), John Ashe, y otras cinco personas, incluido el embajador dominicano ante ese organismo internacional, Francis Lorenzo Suero, fueron detenidos en el marco de un multimillonario caso de corrupción, anunciaron las autoridades estadounidenses el pasado 6 de octubre.
Según la Fiscalía Federal del Distrito Sur de Nueva York, Ashe está acusado de recibir más de 500,000 dólares en sobornos por parte de un constructor que buscaba desarrollar un centro de conferencias de las Naciones Unidas en el territorio chino de Macao. También se habría embolsado más de 800,000 dólares de parte de empresarios chinos para apoyar sus intereses en la ONU y en Antigua y Barbuda, su país de origen y al que representaba ante la organización.
Entre los demás detenidos figura el empresario chino NG Lap Seng, Jeff C. Yin, asistente y Heidi Hong Piao, secretaria.
Según un informe del Bureau de Investigaciones Federales de los Estados Unidos (FBI), en torno a este caso, todo empezó en el 2011, cuando el embajador Francis Lorenzo invita a Jonh Ashe a viajar con él a Macao, China, para conocer empresario chino Ng Lap Seng, mejor conocido como David NG, quien desde un principio estaba interesado en sobornar a Ashe para conseguir beneficios de negocios en antigua y conseguir el apoyo de Naciones Unidas para su proyecto “Macau Conference Center.”
Para ese entonces, Ashe aceptó reunirse con David NG con la condición de que Lorenzo le pagara a él y su familia un viaje a New Orleans, que incluyera tickets de aerolíneas en primera clase y una suite en un hotel lujoso. Después de que Ashe y David se reunieron, Ashe se comunicó con Lorenzo para decirle que este había acordado una reunión entre el Primer Ministro de Antigua y el NG. Y como había realizado este “favor”, le pidió a Lorenzo que le instalara una cancha de basketball en su casa como forma de agradecimiento. Pero el embajador dominicano no sólo estaría pagando un viaje de lujo para la familia de Ashe, una cancha de basketball en su casa, y también le estaría pagando a la esposa de Ashe un total de 2,500 dólares. Todo esto con el propósito de que David NG se pudiera reunir con el Primer Ministro de Antigua para poder invertir en propiedades allá.
Fue entonces cuando el diplomático dominicano y el empresario chino vieron que Ashe les podía ser útil para sus “proyectos” y deciden utilizarlo para conseguir apoyo de naciones Unidas para el proyecto de NG en Macau. En febrero del 2012, Lorenzo redactó un documento a Naciones Unidas con el nombre de Ashe, con el propósito de que este lo presentara al secretario general de EU en apoyo al proyecto de David. En ese mismo año, Ashe presentó el último documento frente a Naciones Unidas, el cual luego Lorenzo utilizó para presentarlo frente a firmas bancarias haciendo creer que el proyecto estaba siendo promovido por Naciones Unidas y conseguir dinero de esas entidades. Todo esto, de acuerdo al informe del FNI
El embajador Lorenzo y Ng Lap Seng estarían relacionados desde el 2009, luego de que el empresario nombró al diplomático dominicano presidente honorario de una fundación identificada en el expediente como “NGO-1”, con sede en New York. Desde entonces, Ng le paga a Lorenzo de manera regular un sueldo mensual de 20,000 dólares, agrega el referido informe.
A principio del 2013, Jeff Yin, quien es el asistente de NG, constantemente presionaba a Lorenzo para que acelerara el proceso en Naciones Unidas y hasta lo amenazaba con que cortaría su pago si no lo aceleraba. Al Lorenzo sentirse presionado por todas las demandas que le hacía Yin, mandado por David NG, arregló todo para que Ashe le hiciera un documento donde el promueva la compañía privada de David para que esta sea quien desarrolle el proyecto de conferencia y esta sea la única que se beneficie.
El informe revela que Lorenzo preparó otro viaje con Ashe a Macao y otras personalidades de Naciones Unidas y se encontraran con David. A cambio de esto Ashe exigió al embajador la suma de 200,000 dólares a su cuenta. Y antes de que el viaje se llevara a cabo Ashe le aseguró a Lorenzo que aunque David había realizado promesas vacías, el como quiera iba a asistir, porque sabía lo importante que era eso, pero que primero tenía que ver los fondos y que él no iba a usar esos fondos para cosas personales sino que eran para la oficina PGA. En ese momento Ashe estaba pidiendo entre 100 y 200 millones de dólares.
Según la Fiscalía Federal del Distrito Sur de Nueva York, Ashe recibió más de 500.000 mil dólares en sobornos a cambio de que este defendiese ante el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, la construcción de un centro de conferencias en Macao, un proyecto valorado en miles de millones de dólares, y esos pagos fueron facilitados presuntamente por dos de los acusados, incluido el embajador dominicano Francis Lorenzo. Además el ex presidente de la Asamblea de la ONU recibió también 800.000 mil dólares para apoyar los intereses de NG en la ONU y en Antigua y Barbuda, su país de origen y al que representaba ante la organización. Ashe también está acusado de fraude fiscal por no reportar o pagar impuestos sobre la renta por más de $1 millón de dólares que recibió en sobornos en 2013 y 2014.
En total, el diplomático de Antigua y Barbuda depositó entre 2012 y 2014 más de 3 millones de dólares procedentes del extranjero en dos cuentas bancarias en EE.UU. supuestamente vinculadas a su presidencia de la Asamblea, desde las que sacó dinero para gastos personales y transfirió grandes sumas a otras cuentas.
Mientras la acusación sobre supuesta red de sobornos y tráfico de influencias detalla datos de la investigación que comprende los años 2011 y 2014, donde señala a Lorenzo, NG, Yin, Yan y Piao, con múltiples cargos relacionados con el soborno. El expediente del caso, presentado el 5 de octubre por el FBI ante el Tribunal Federal del Distrito Sur de Nueva York, indica que los millones que recibía el expresidente de la Asamblea General de la ONU durante 2013 provinieron de la fundación que preside Lorenzo. También se destaca la transferencia de US$30 mil al mes que hacia el embajador a una compañía que dirige su hermano Domingo Antonio Lorenzo Suero. Las autoridades sospechan que parte del dinero enviado desde los Estados Unidos a la República Dominicana, fueron depositados a nombre de empleadas domésticas de sus familiares.