Un grupo de 55 jóvenes denunciaron que fueron expulsados arbitrariamente de la escuela Nacional de Penitenciaria luego de pasar al menos 15 días en entrenamiento de rutina.
Afirman que la deplorable acción se llevo a cabo sin razón y bajo amenazas luego de que se le realizara unos exámenes medico pertinentes.
Según declararon, bajo amenaza de que lo podían fichar como desertores, los obligaron a firmar un documentos donde decía que se iban por cuenta propia en la Procuraduría.
Las fichas la harían debido a que tenían bajo su poder todos los datos de los jóvenes
Detallaron que quienes sacaron al grupo de la institución lo hicieron de una manera “extraña” porque pareciera que no querían que sus superiores se dieran cuenta
Manifestaron que los encargados del grupo eran los comandante Serrata y Vladimir y Cristiana.