La presión aumenta en Puerto Rico para que renuncie a su puesto el gobernador, Ricardo Rosselló, tras la revelación del contenido de un chat privado con comentarios homofóbicos, insultos e, incluso, bromas sobre los muertos por el huracán María.
Pese a los reclamos, este lunes el funcionario advirtió de que no lo hará y que tomará las decisiones que a su juicio “sean mejores” para Puerto Rico.
En su primera entrevista tras la publicación del contenido del chat, Rosselló también quiso dejar claro, a través de la emisora Nación Z, que tras evaluar y analizar la situación creada ha concluido que no ha cometido ningún delito con las expresiones que aparecen en el mismo. “Ninguna de esa información era privilegiada o confidencial”, remarcó.
ras reiterar sus disculpas y volver a pedir perdón a los ciudadanos dijo que el proceso está siendo “difícil”. La grave crisis política que vive la isla llega en su peor momento, inmersa en una quiebra, en una crisis económica y aún recuperándose del huracán María, casi dos años después.
Una recuperación para la que precisa fondos de Estados Unidos y los escándalos, tal y como afirmó este sábado la representante de Puerto Rico en la Cámara de Representantes de EEUU Jenniffer González (también objeto de burla en el chat), ponen una “sombra” sobre los mismos.
Por su parte, la alcaldesa de San Juan, Carmen Yulín, dijo que el escándalo, denominado “Telegramgate” -ya que el chat se hizo en la aplicación Telegram- o RickyLeaks, sólo va a generar más desconfianza de Washington.
Un territorio indignado ante el contenido del chat privado y que este lunes, por tercer día consecutivo, saldrá a la calle a pedir la dimisión de Rosselló y mostrar su rechazo por las palabras vertidas en las casi 900 paginas de chat en el que participaban funcionarios del gobierno, asesores de comunicación y el propio Rosselló.
En el mismo se puede leer como, sobre Yulin, el representante del gobierno ante la Junta de Supervisión Fiscal (JSF), asegura que está “salivando por caerle a tiros”, razón por la cual la alcaldesa de San Juan le ha demandado por amenaza de muerte.
Por otro lado, Rosselló llama “puta” a la expresidenta del Concejo Municipal de Nueva York Melissa Mark Viverito y, en otro momento, Sobrino hace un comentario homofóbico sobre Ricky Martin de quien dice que es un “chovinista masculino” que hace el amor con hombres ya que las “mujeres no están a su altura”.
En otras partes del chat dudan de la orientación sexual de un senador de Puerto Rico y critican el físico de un periodista o insultan a otros.
También se mofan de un líder independentista de la isla de quien bromean que igual habría que bajar las banderas a media asta “durante quince minutos”.
La presión para que dimita aumenta cada día, ya sea a través de sus propios compañeros de partido que le han dejado sólo, como a través de las protestas, casi diarias y en momentos violentas, para pedir su renuncia, o rostros conocidos de la isla como Bad Bunny, Ricky Martin y Residente (ex Calle 13), quien, incluso, le avisó que si “no renuncia ahora, lo vamos a sacar”.
El partido de Rosselló, el Partido Nuevo Progresista (PNP), encabezados por el presidente de la Cámara, Carlos Mendez, y del Senado, Thomas Rivera, así como González, buscan un nombre que pudiera ser el sustituto del exsecretario de Estado, destituido este sábado, ya que en caso de que dimitiera Rosselló, el sería el encargado de asumir las riendas de la isla.